Silvana Montenegro: Poder económico de la comunidad hispana y latina

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Los hispanos y latinos son una fuerza creciente en la economía nacional, que representa $3,6 billones en PIB y $3,78 billones en poder adquisitivo, según el reciente informe de Latino Donor Collaborative. La “economía latina” dentro de Estados Unidos es más grande que las economías del Reino Unido, India y Francia.

Las empresas de propiedad latina o hispana están creciendo diez veces más rápido que las de otros grupos demográficos y representan una de cada cinco empresas tecnológicas, según un informe reciente de la organización Latino Business Action Network (LBAN, por sus siglas en inglés). Además, las empresas propiedad de latina están superando a otras en términos de crecimiento de ingresos y adopción de inteligencia artificial.

Según un estudio reciente, se espera que los latinos constituyan el 70% de los nuevos propietarios de casa para el año 2040. Además, la comunidad representa el grupo edad promedio más joven del país lo cual supone un impacto significativo en los consumidores. Aquí en la ciudad de Nueva York, los latinos son el segundo grupo étnico más grande, según el Instituto Latino de Política Pública de UCLA. Sin embargo, la representación por sí sola no es sinónimo de un acceso equitativo a las oportunidades. Según el McKinsey Institute, la riqueza de la población latina ha crecido un 7 % a nivel anual y promedio durante los últimos 20 años, pero el promedio de la riqueza en los hogares latinos fue de aproximadamente $36,000 en 2019.

En un mundo de paridad total, esta comunidad podría gastar $660 mil millones adicionales al año. Estas estadísticas representan una importante oportunidad de negocio. Por eso, es fundamental que las corporaciones y nuestra sociedad aprovechen esta oportunidad y los recursos disponibles para apoyar a estas comunidades, lo que a su vez ayudará a impulsar nuestra economía.

Una fuerza laboral inclusiva

Crecí en Brasil y me mudé a Nueva York hace 23 años. A mi llegada a los EE. UU., inmediatamente me etiquetaron como “hispana”, un término confuso que nunca había usado antes. Inicialmente, intenté encajar en lo que percibí como normas culturales, pero mis compañeros me animaron a adoptar mi singularidad como una fortaleza, y así lo hice. Fue la mejor decisión, la cual también benefició a mi carrera y a mis empleadores.

Crear espacios que den la bienvenida a profesionales con experiencias y orígenes diversos no solo amplía las perspectivas, sino que también fomenta una mayor innovación y soluciones inclusivas que pueden ampliar el acceso a oportunidades económicas e impulsar los resultados comerciales. Se espera que los hispanos y latinos representen el 78% de los nuevos trabajadores netos en los EE. UU. entre 2020 y 2030. Es por eso, que tan crucial que el manejo de talento en todos los sectores refleje los cambios demográficos del país para ayudar a garantizar una fuerza laboral próspera.

Nuestro éxito como comunidad depende de nuestra capacidad de apoyarnos unos a otros y ayudar a abrir puertas a otras comunidades. Ya sea que se trate de notables líderes cívicos, políticos y comunitarios o propietarios de pequeñas empresas, todos tenemos la capacidad de impulsar las economías locales y contribuir a la vitalidad de nuestras comunidades. Un ejemplo de este apoyo comunitario se manifiesta en el trabajo de la organización sin fines de lucro Dallas County Promise, que ofrece becas a estudiantes de escuela secundaria de bajos ingresos que están en camino a la educación superior; o a nivel personal a través de personas como Wendy Velazquez, una neoyorquina nativa y gerente comunitario de Chase en el Lower East Side de Manhattan, dedicada a ayudar a los residentes a mejorar su salud financiera.

Impulsar el crecimiento del negocio

Además de las iniciativas de la fuerza laboral, apoyar a nuestros emprendedores es fundamental para cerrar la brecha de riqueza. Las pequeñas y medianas empresas fortalecen nuestra economía, pero el acceso a capital y recursos financieros sigue siendo un obstáculo para muchas de nuestras comunidades. Según el informe State of Latino Entrepreneurship de 2023, mientras que las empresas propiedad de latina están aumentando en número, las mismas reciben menos del 2 % de la financiación de capital de riesgo. Además, el Instituto JPMorganChase descubrió que las empresas propiedad de afroamericanas e hispanas alcanzan ingresos de $1 millón con menos frecuencia que otras comunidades. La falta de acceso a capital, contratos gubernamentales y corporativos, y oportunidades educativas y de establecimiento de redes de contacto han exacerbado estos desafíos. Crear acceso a herramientas, recursos y redes sólidas para los emprendedores es clave para ayudarles a construir negocios sostenibles.

A través de asociaciones con organizaciones como la Latino Business Action Network (LBAN), una organización sin ánimo de lucro con sede en Silicon Valley que se asocia con la Universidad de Stanford, a la que apoyamos en el reciente lanzamiento de su programa Startup Accelerator, podemos ayudar a los emprendedores de todo el país a escalar sus negocios. Dichas asociaciones son clave para los nuevos creadores de negocios y vitales para el crecimiento de nuestras comunidades.

Profundizar en nuestro impacto

Como líderes de las comunidades locales, ya sea en los negocios, en el área legislativa o en cualquier otro sector, cada uno de nosotros desempeña un papel crucial para abordar las disparidades a las que se enfrenta la comunidad hispana y latina en todo el país y ayudar así a cerrar la brecha de riqueza.

Nuestro éxito colectivo depende de nuestro compromiso con las comunidades a las que servimos y representamos. Este trabajo no se puede realizar de la noche a la mañana, ni puede depender de una sola organización o líder. Al aprovechar los esfuerzos colaborativos del sector privado, las instituciones públicas y organizaciones comunitarias, podemos forjar un mejor camino para donde los hispanos y latinos tengan las mismas oportunidades para prosperar. Esto no solo reforzará su impacto económico, sino que también fomentará una economía más fuerte para todos.

New York Post/ Silvana Montenegro, Líder global de Advancing Hispanics & Latinos de JPMorganChase