Florida presentó una demanda contra la administración del presidente Joe Biden el martes alegando que su política de inmigración es ilegal, y el gobernador republicano Ron DeSantis firmó una orden que prohíbe a las agencias estatales ayudar con la reubicación de inmigrantes indocumentados que llegan al estado.
La orden de DeSantis autorizó al Departamento de Aplicación de la Ley de Florida y a la Patrulla de Carreteras de Florida «a detener cualquier avión, autobús u otro vehículo dentro del Estado de Florida que se crea razonablemente que transporta extranjeros ilegales a Florida desde la frontera suroeste», si así lo permite el gobierno federal. y ley estatal. La advertencia de que se debe seguir la ley probablemente les impida incautar aviones federales.
También ordenó a las agencias que recopilaran información sobre las identidades de cualquier inmigrante que llegara ilegalmente a Florida desde la frontera con México y les dijo a las agencias estatales que no gasten dinero en ayudar a esos inmigrantes a menos que lo exija la ley.
La representante estatal demócrata Anna Eskamani criticó a DeSantis, diciendo que está usando el tema de la inmigración para ganar puntos políticos con su base conservadora en lugar de centrarse en otros problemas que enfrenta el estado.
«Está completamente loco y solo quiere distraer a la gente común de los problemas de la vida real», dijo. “Tenemos una crisis de vivienda asequible, tenemos que preocuparnos por el cambio climático, tenemos gente que no puede encontrar un trabajo bien remunerado. Hay tantos problemas a nuestro alrededor y esto es lo que él elige «.
La demanda de la procuradora general Ashley Moody afirma que la política federal de inmigración le costará al estado millones de dólares y causará daños a Florida.
“Si bien algunos migrantes que llegan tienen solicitudes de asilo legítimas, muchos no. Algunos son pandilleros y narcotraficantes que explotan la crisis en la frontera, como lo demuestra la enorme cantidad de fentanilo incautado en la frontera este año ”, dice la demanda.
Moody y DeSantis celebraron una conferencia de prensa en el suroeste de Florida en la que ambos condenaron enérgicamente a Biden sobre inmigración y elogiaron las políticas del expresidente Donald Trump.
«El presidente Biden está ayudando e incitando a los cárteles criminales», dijo Moody.
Cuando se le preguntó sobre la demanda y la orden de DeSantis, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que no había visto la demanda.
“Cualquier republicano o cualquier miembro que quiera tener una conversación constructiva sobre soluciones para abordar lo que todos estamos de acuerdo no es un enfoque operativo o moral sostenible a largo plazo para la inmigración, estamos felices de tener esa conversación”, dijo Psaki.
DeSantis, considerado un posible candidato presidencial para 2024, ha estado atacando a Biden por cuestiones de inmigración durante meses. Envió agentes de la ley de Florida a Texas para ayudar a disuadir los cruces fronterizos ilegales y él y Moody visitaron la frontera y realizaron una conferencia de prensa para hablar sobre el tema.
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