En el último intento desesperado de lidiar con la escasez de combustible que ha paralizado la economía de Venezuela, los líderes gubernamentales están tratando de reutilizar dos mejoradores de petróleo masivos para convertirlos en un ingrediente principal para la gasolina.
Con las sanciones de Estados Unidos que impiden que el país importe nafta, un producto del petróleo que sus refinerías utilizan como materia prima, la estatal Petróleos de Venezuela buscará fabricar las suyas propias en mejoradores diseñados para procesar crudo pesado en petróleo más liviano para el mercado internacional, según los documentos vistos por Bloomberg y personas con conocimiento del plan, que pidieron no ser identificadas porque la información no es pública. Las plantas son la sociedad Petropiar con Chevron Corp. y la empresa Petrocedeño con Total SE y Equinor ASA.
La aguda escasez de combustible en Venezuela ha obligado a cerrar empresas y fábricas, mientras que los conductores hacen largas filas durante horas o incluso días para conseguir algo de combustible. La conversión de los mejoradores de crudo de la era de Hugo Chávez marca otra desviación dramática de una época en la que la nación fundadora de la OPEP era una de las principales exportadoras de petróleo, ahora reducida a una de las naciones más pobres del hemisferio occidental bajo el régimen de Nicolás Maduro sancionado por Estados Unidos.
Las obras en las plantas Petropiar y Petrocedeno, que eliminan el azufre y otras impurezas del crudo pesado lodoso de la Faja del Orinoco, comenzaron en abril, dijeron las personas.
No está claro cómo PDVSA puede llevar a cabo la revisión sin la ayuda de socios extranjeros o contratistas internacionales, que ya no pueden hacer negocios con el productor estatal de petróleo golpeado y con problemas de liquidez. La empresa ha tenido dificultades para realizar el mantenimiento básico en sus plantas, que carecen de piezas de repuesto que no ha podido importar.
PDVSA, Chevron y Total no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios. Un representante de Equinor remitió cualquier consulta a PDVSA.
Las refinerías suelen fabricar su propia nafta pesada como etapa del procesamiento del crudo en gasolina. Las unidades de PDVSA han perdido durante mucho tiempo esa capacidad debido a equipos rotos. Los mejoradores del país están en mejor forma porque fueron operados con la ayuda de socios extranjeros hasta hace poco. Además, el procesamiento de petróleo pesado en el llamado crudo sintético en las plantas ya involucraba cierta producción de nafta.
Convertir a los mejoradores en proveedores de materia prima para refinerías, implica la instalación de nuevos equipos y ductos. PDVSA busca contratistas locales para ese fin, dijeron las personas. La revisión no evitará que las plantas también se utilicen para su propósito original de hacer crudo sintético.
Las plantas alimentarán inicialmente a las refinerías Cardón y Puerto La Cruz de PDVSA con 30.000 barriles diarios de nafta pesada, según muestran los documentos. Aún se está discutiendo con los contratistas un plan para instalar ductos que permitirá que los suministros alcancen los 112.000 barriles por día, dijeron las personas.
No es la primera vez que se reutilizan los mejoradores desde que las sanciones de Estados Unidos prácticamente han excluido a Venezuela del mercado internacional de crudo.
Los cuatro mejoradores de PDVSA se convirtieron en plantas de mezcla más simples a mediados de 2019. El cambio significó detener la producción de las mezclas de petróleo ligero Petrozuata y Zuata Sweet para centrarse en el petróleo pesado Merey 16, que se vende principalmente en el mercado asiático.
Fabiola Zerpa con asistencia de Lucia Kassai/ Bloomberg
