Elon Musk aspira que en un año haya un millón de estos vehículos circulando en EE.UU.
Tesla comenzó oficialmente su servicio de robotaxis en Austin, Texas, en una fase inicial de operaciones que incluye la presencia de un empleado de la compañía en el asiento del copiloto para garantizar la supervisión y seguridad de cada trayecto.
El despliegue inicial del servicio fue selecto para un grupo de personalidades influyentes, conocidas por su cercanía con Tesla y su director ejecutivo, Elon Musk. Algunos de estos compartieron sus experiencias de viaje a través de la plataforma X.
El horario de operación de los robotaxis de Tesla se estableció desde las 6:00 a.m. hasta la medianoche, con la posibilidad de interrupción si las condiciones climáticas se vuelven adversas. La tarifa fijada para los usuarios es de $4.20 por viaje.
Este lanzamiento sigue a los anuncios previos de Elon Musk en mayo, donde anticipó la puesta en marcha de una flota de diez vehículos Model Y en Austin para pruebas de funcionamiento.
Un millón de robotaxis para EE.UU
El objetivo a largo plazo de Musk es ambicioso. Además de su intención de llevarlo a otras ciudades, también proyecta la circulación de hasta un millón de robotaxis en un año. Aunque él mismo ha reconocido que este proceso podría tardar más tiempo.
Inicialmente, los robotaxis operarán dentro de un área geográfica delimitada de Austin, ciudad donde Tesla tiene su sede principal. La compañía indicó que se mantendrá un monitoreo riguroso sobre el desempeño de estos vehículos. Musk también ha expresado su intención de expandir la cobertura a otras ciudades a lo largo del presente año.
El sistema de conducción autónoma de Tesla, conocido como Full Self-Driving (FSD), ha sido objeto de críticas recurrentes. Estas objeciones se centran en la percepción de que el nombre es equívoco, dado que el sistema aún exige que los conductores permanezcan atentos a la carretera y listos para retomar el control del vehículo en cualquier momento.
Además, la competencia en el sector de los taxis autónomos es cada vez más intensa. Empresas como Waymo ya implementaron servicios de vehículos sin conductor en ciudades importantes como Los Ángeles, San Diego y la propia Austin.
Agencias