El venezolano Daniel Dhers gana la medalla de plata en el debut del freestyle de BMX en el programa olímpico.
Para Dhers, esperar tanto por su momento olímpico valió la pena.
Rey indiscutido de los X Games durante casi una década, el rider venezolano conquistó el domingo la medalla de plata en el debut del BMX freestyle en unos Juegos Olímpicos.
En una vibrante final, el australiano Logan Martin se llevó el oro tras un primer recorrido casi sin fisuras que cautivó a un puñado de personas presente en el Parque de Deportes Urbanos de Ariake y a las apostadas en un puente peatonal adyacente.
Dhers cuenta con cinco campeonatos de los X Games en su palmarés en una trayectoria que empezó en 2003, pero subir al segundo cajón del podio olímpico — y ver flamear la bandera de su país — fue algo muy conmovedor para el caraqueño de 36 años.
Venir a los Juegos Olímpicos “me renovó el sentimiento de ser venezolano”, dijo.
Dhers había empezado a pensar en el retiro cuando se supo que su rebelde deporte — de atrevidas piruetas en rampas — formaría parte del programa de Tokio 2020.
Decidió esperar y tampoco se arredró por el aplazamiento de un año debido a la pandemia de coronavirus.
No se los iba a perder por nada. Había recuperado su fervor competitivo. Y representar a Venezuela — una nación sumida en una severa crisis social y económica — no tenía comparación.
“En un momento en mi vida dejé de ir a Venezuela y perdí un poco de motivación”, contó. “Cuando nos anuncian que vamos a los Juegos se me renueva la energía de querer competir al máximo nivel. Llevaba varios años que competía al 70%. Llegas al máximo y después qué más hay. Pero los Juegos Olímpicos te dan una alegría. Es un mundo muy bonito”.
Lo satisfactorio fue haber sentido desde la distancia todo el aliento de sus compatriotas.
“Imagínate, mi país ha estado en conflicto por los últimos 20 años. Esto prácticamente dio un momento de silencio en Venezuela, un momento de unión y sanación”, afirmó. “Todo el mundo quiere que los atletas de Venezuela, sin importar la inclinación política, traigan medallas al país. Eso es algo demasiado bello. Era algo que no pensé que iba a pasar en mi país por la historia complicada que tenemos”.
“Yo soy una sola persona de los 30 y pico millones de venezolanos, pero le puedo dar esa alegría al país», acotó.
Martin recibió una puntuación de 93.3 en el primer de los recorridos y luego se dedicó a observar cómo los otros ocho riders trataban de darle alcance. El segundo recorrido del australiano de 27 años fue simbólico.
Dhers atrapó la plata gracias a una gran actuación — que incluyó una voltereta frontal en el spine — en el segundo recorrido para obtener 92.05 puntos.
“No tenía que escatimar ningún truco, tenía que ir a darle con todo», dijo Dhers.
El bronce fue para el británico Declan Bruce con una puntuación de 90.8. El costarricense Kenneth Tencio quedó fuera del podio por apenas tres décimas, con 90.5.
A primera hora, la británica Charlotte Worthington ofreció un recital en la final femenina, completando el primer giro de 360 grados para superar a la favorita, la estadounidense Hannah Roberts.
Roberts, tres veces campeona del mundo a sus 19 años, dominó en su primer recorrido ejecutando un giro con tailspin que le valió para obtener 96.1 puntos.
El bronce fue para la suiza Nikita Ducarroz con un 89.2 en su segundo recorrido.
La chilena Macarena Pérez, única latinoamericana en la prueba femenina, firmó un 73.80 en el segundo recorrido y quedó octava de nueve.
El BMX freestyle llegó a los Juegos Olímpicos tras surgir en los X Games, la competencia por excelencia de los deportes extremos en la década de los 90. Dhers apareció en la escena y conquistó su primer título de los X Games en 2017.
Su gran salto se produjo cuando pasó a la tutela de la Unión Ciclista Internacional en 2016, lo que le dio legitimidad al deporte y le brindó a sus riders el espacio para competir en el circuito de la Copa del Mundo.
En 2017 se confirmó que sería deporte olímpico junto al surf, la escalada deportiva, el baloncesto 3×3, el skateboarding y el karate.
Y seguirá siéndolo en la próxima cita, la de París 2024. Dhers se proponer estar presente.
“Tras haber vivido esto (con las restricciones por la pandemia), no me quiero ni imaginar lo que son unos Juegos al 100%», afirmó».
Eric Nuñez
