El expresidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA) Rafael Ramírez denunció este viernes que funcionarios armados allanaron su vivienda en el país caribeño, situación que calificó de “irregular, represiva, persecución e intimidación”.
En un comunicado compartido en redes sociales, detalló que la vivienda ocupada actualmente por una familia con dos hijos menores de edad, fue adquirida por él y su esposa “mucho antes de haber sido designado ministro de Petróleo y presidente de PDVSA”.
“Por las amenazas públicas y notorias recibidas por parte de Nicolás Maduro y su gobierno, no he podido volver a mi país, y tengo que vivir en el exilio para preservar mi vida y la seguridad de mi familia”, resaltó.
Ramírez indicó que el allanamiento de la vivienda ocurrió este jueves, 25 de febrero. En la misiva señaló que “esta nueva agresión, es parte de la continuada violencia ordenada por Maduro en mi contra, el cual abusa de todo su poder como Jefe de Estado y de su control sobre el Ministerio Público, el Poder Judicial y el monopolio de los medios de comunicación social”.
“Me persiguen y agreden, utilizando a la justicia como instrumento de justificación y coacción, judicializando la política, un triste mecanismo que se ha ensayado en nuestra región”, prosiguió el exministro de Petróleo de Hugo Chávez.
Asimismo, comparó el hecho con procesos judiciales contra expresidentes de América Latina como Dilma Rousseff, Cristina Fernández, Lula Da Silva y Rafael Correa.
“A diferencia del resto de los Estados de América Latina, en Venezuela no hay libertad de expresión, ni posibilidad alguna de defenderse, y se ha instalado el miedo, la censura y el silencio, para ocultar los actos arbitrarios y la violación de los derechos humanos de todo aquel que se oponga a los designios de este grupete que controla el país”, dijo.
