Robert Hur, fiscal especial encargado de investigar el indebido manejo de documentos clasificados en que incurrió el presidente Joe Biden, testificó ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes y, después de casi cinco horas, reiteró que su evaluación sobre la memoria y las habilidades cognitivas del presidente presentados en su informe era “necesaria, precisa y justa”, pero también dejó en claro no haber exonerado al presidente.
A principios del mes pasado, el abogado neoyorquino publicó un informe de 388 páginas donde, argumentando la mala memoria del demócrata de 81 años, se abstuvo a fincarle los cargos penales que le implicaban haber retenido en su casa de Delaware y en una oficina privada, una veintena de documentos clasificados correspondientes a la etapa cuando fungió como vicepresidente de Barack Obama, entre 2009 y 2017.
“Basándonos en nuestras interacciones directas y observaciones de él, es alguien sobre quien muchos jurados querrán identificar dudas razonables. Sería difícil convencer a un jurado de que debería condenarlo (para entonces un expresidente de más de 80 años) por un delito grave que requiere un estado mental de obstinación.
También hemos considerado que, en el juicio, el señor Biden probablemente se presentaría ante un jurado, como lo hizo durante nuestra entrevista, como un anciano comprensivo, bien intencionado y con mala memoria”, señala parte del informe.
Un mes después, a Hur no le tembló la voz para presentar una declaración donde aclaró que su valoración en el informe sobre la memoria del presidente “fue necesaria, exacta y justa”.
“Sabía que para que mi decisión fuese creíble, no podía anunciar simplemente que recomendaba que no se presentaran cargos y dejarlo así. Necesitaba explicar por qué. Las pruebas como el propio presidente pusieron su memoria en el centro.
Y lo que es más importante, lo que escribí es lo que creo que las pruebas muestran, y lo que espero que el jurado percibiría y creería. No diluí mi explicación. Y tampoco descalifiqué al presidente de forma injusta. Expliqué al fiscal general mi decisión y las razones“, detalló.
Posteriormente, Jim Jordan, presidente del Poder Judicial de la Cámara de Representantes, cuestionó al fiscal especial por qué Biden violó las reglas relativas a los documentos clasificados.
“La conclusión sobre por qué exactamente el presidente hizo lo que hizo, no es algo que abordamos explícitamente en el informe.
El informe explica mi decisión al fiscal general de que no se justificaban cargos penales de esta manera”, respondió el fiscal de 51 años.
El informe de Robert Hur señalaba la mala memoria de Joe Biden derivada de su avanzada edad, como justificación para no fincarle cargos por el manejo indebido de documentos, desató la controversia entre republicanos y demócratas. (Crédito: Steve Ruark / AP)
Asimismo, Robert Hur refirió que, aun cuando descubrieron una grabación en la cual Biden le leía información clasificada en voz alta a un escritor fantasma con el objetivo de escribir un libro, se consideró que los datos ya carecían de valor y por lo tanto su acción no ameritaba sancionarlo.
“Mi equipo y yo llevamos a cabo una investigación exhaustiva e independiente. Identificamos evidencia de que el presidente retuvo intencionalmente materiales clasificados después del final de su vicepresidencia, cuando era un ciudadano privado.
Esta evidencia incluía una conversación grabada en audio durante la cual el Sr. Biden le dijo a su escritor fantasma que ‘acababa de encontrar todas las cosas clasificadas abajo’. Cuando el señor Biden dijo esto, era un ciudadano privado que hablaba con su escritor fantasma en su casa privada de alquiler en Virginia.
También identificamos otras conversaciones grabadas durante las cuales el señor Biden leía información clasificada en voz alta a su escritor fantasma. Sin embargo, no identificamos evidencia que alcanzara el nivel de prueba más allá de toda duda razonable.
Debido a que la evidencia no cumplió con ese estándar, me negué a recomendar cargos penales contra el Sr. Biden.
‘Exoneración’ no es una palabra que se utiliza en mi informe y no forma parte de mi tarea como fiscal“, expresó.
En virtud de lo cuidadoso que Robert Hur se comportó en sus declaraciones recibió críticas tanto de los defensores de Biden como de sus detractores.
Para los demócratas haber ante puesto la edad de Biden en el informe del fiscal especial representa un intento de golpear su imagen para favorecer a Trump; en tanto que para los republicanos la renuencia de acusar al presidente por el manejo indebido de documentos oficiales en que incurrió tampoco los dejó satisfechos con respecto al proceder de Hurt.
La Opinión / Agencias
