Al menos 20 senadores de Estados Unidos expresaron este jueves 31 de agosto su preocupación ante las distintas amenazas que penden sobre las primarias de la oposición venezolana, a celebrarse el próximo 22 de octubre.
A través de una carta dirigida al secretario de Estado, Antony Blinken, los senadores advirtieron sobre los «esfuerzos persistentes» que realiza la dictadura de Nicolás Maduro para «destruir cualquier apariencia» de elecciones primarias o comicios generales legítimos.
Además, la carta, liderada por Dick Durbin, Bill Cassidy, Bob Menéndez, Joni Ernst, Tim Kaine y Marco Rubio, resalta las siguientes exigencias:
1-. Permitir que las primarias se lleven a cabo según lo previsto por la Comisión Nacional de Primaria, sin interferencias del régimen.
2-. La participación de todos los candidatos y que no sea el régimen de Maduro el que elija a su propio oponente, al calificar de inaceptable la arbitraria práctica de emitir prohibiciones administrativas a los candidatos.
3-. Permitir que quien gane las primarias se postule en las elecciones presidenciales de 2024, en una elección legítima, que cuente con observación internacional que velen por el cumplimiento de la voluntad del pueblo venezolano.
“El pueblo venezolano no puede permitirse ver otra elección fraudulenta, que solo traerá más sufrimiento a su nación y fomentará una mayor inestabilidad en las Américas”, advierten los senadores.
El documento también fue suscrito por Dianne Feinstein, Rick Scott, Michael Bennet, John Cornyn, Ben Cardin, Jeff Merkley, Alex Padilla, Catherine Cortez-Masto, Thom Tillis, Chris Coons, Cory Booker, Peter Welch, Chris Murphy y Marsha Blackburn.
En él, los senadores recuerdan que más de siete millones de venezolanos ya han huido del país debido a la desesperación ocasionada por la crisis socioeconómica que vive el país, la cual, advierten solo empeorará si se mantiene la “volatilidad política”.
“Desafortunadamente, con una elección presidencial programada para 2024, el régimen de Maduro ya está haciendo todo lo posible para socavar las perspectivas de un voto creíble”, recalca.
Estefani Brito / DLA