Haines señaló que Rusia, China e Irán son los peores ofensores, pero agregó que el gobierno federal nunca ha estado tan preparado como ahora para proteger la democracia estadounidense de la influencia extranjera.
«Son un número creciente de agentes extranjeros, incluyendo entidades no estatales, que están tratando de involucrarse en actividades de influencia en las elecciones», dijo al Comité de Inteligencia del Senado en una audiencia sobre las amenazas a las elecciones de 2024.
Según la directora de inteligencia, los actores extranjeros estatales usan cada vez más a empresas privadas para ejecutar operaciones de influencia en las elecciones, lo que hace más difícil rastrear a quienes están detrás de tales esfuerzos.
Haines advirtió que las innovaciones en el campo de la inteligencia artificial (AI) han permitido a agentes extranjeros producir mensajes políticos en apariencia auténticos, con mayor eficiencia, en mayor escala y con contenidos adaptados a diferentes idiomas y culturas.
«Y, por supuesto, los principales actores extranjeros que se involucran en actividades de influencia dirigidas a Estados Unidos en relación con nuestras elecciones son Rusia, la República Popular de China e Irán», afirmó.
«Específicamente Rusia sigue siendo la amenaza extranjera más activa a nuestras elecciones».
La advertencia de Haines se da en el marco de una serie de audiencias parlamentarias de cara a las elecciones presidenciales de noviembre, que serán, casi con seguridad, una reedición de las de 2020 entre el demócrata Joe Biden y el expresidente republicano Donald Trump.
El presidente del Comité, el senador Mark Warner dijo en la audiencia que adversarios como el presidente ruso Vladimir Putin, estaban «más motivados que nunca» a interferir.
«Putin entiende claramente que influenciar la opinión pública y moldear las elecciones en Estados Unidos es una forma económica de erosionar el apoyo estadounidense y Occidental a Ucrania», dijo Warner.
El congresista apoyó las preocupaciones de Haines de que los audios y videos impulsados por AI -como una falsa llamada automatizada en la que Biden aparentemente dio a los votantes una fecha equivocada para las primarias de New Hampshire, en enero- estaban aumentado la escala y sofisticación de los ataques.
AFP