«Los locos abren los caminos que más tarde recorren los sabios.» (Carlo Dossi)
La contundente victoria de Javier Milei sobre las mafias del Kirchnerismo en Argentina, estoy seguro que marcará y abrirá un nuevo capítulo en la historia política contemporánea de Latinoamérica.
El triunfo de Milei es una irrebatible conquista de la derecha en la región en una latinoamérica que se dejo cautivar por cantos de sirenas de una izquierda oxidada, corrupta, violenta, violadora de los ddhh humanos en el mundo, transgresora de la libertad de opinión y ahora con Lula intentaban apoderarse del resto del conciertos de naciones en el continente americano donde destacó al Presidente Argentino Javier Milei como una auténtica antítesis figura de Lula, siendo hoy en estos tiempos tan duros la contra parte del mandatario Brasileño.
Lula viene arropado por la corrupción de la mano de Odebrecht, por su deseo de empujar el régimen de Maduro a costa de lo que sea mientras que Milei está del otro lado cera de allí que Milei piensa diametralmente distinto incluso es de la tesis que Venezuela se merece un gobierno democrático completamente distinto a la autocracia o dictadura del desgobierno de Nicolás Maduro Moros.
El triunfo del Pueblo Argentino le abrirá las puertas a otra visión del mundo con relación a Latinoamérica en el campo comercial especialmente a los EEUU de Norte América. Hoy invadido nuestro continente por potencias extremistas de izquierda de la mano de Lula, Ortega, Maduro, Boric, López Obrador, Arce y Petro no hay duda que Milei volteara la tortilla y se convertirá en un gran aliado de los EEUU, de Venezuela y confrontará los dardos venenosos de Petro contra el pueblo de Israel entre otras muchas cosas no menos importante.
El recién electo Presidente Argentino jamás ocupo un cargo público y se estrena nada más nada menos como Presidente de Argentina convirtiéndose en la punta del iceberg de una nueva generación de políticos y dónde Venezuela será la continuidad de ese cambio en Latinoamérica.
La elección de Javier Milei en Argentina es la muestra más palpable del momento.
Joaquín Chaparro