El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, admitió este viernes 30-S que la reconstrucción de las zonas que ha devastado el huracán Ian, uno de los “peores” de la historia del país, puede llevar “años”.
En un discurso para dar cuenta de los últimos datos sobre los efectos de Ian, Biden recalcó que esta no es una crisis de Florida, sino una crisis estadounidense, y pidió a los ciudadanos de Carolina del Sur, el estado en el que ya tocó tierra la tarde de este viernes el huracán, que escuchen a las autoridades y sigan sus directrices.
En el caso de Florida, recordó que los efectos han sido de lejos mucho más devastadores y advirtió que sólo se está empezando a ver la magnitud de la destrucción que ha causado el huracán, entre “los peores de la historia de la nación”.
“Llevará meses, años, reconstruir, y nuestros corazones están hoy con aquellos cuyas vidas han quedado devastadas por esta tormenta#, dijo el mandatario, quien añadió que “el corazón de Estados Unidos está literalmente roto”.
“Voy a hacer todo lo que pueda por ustedes”, dijo Biden dirigiéndose a los ciudadanos de Florida.
Aseguró que ha ordenado desplegar la mayor cantidad de efectivos de rescate de la historia reciente y entre otros datos apuntó que la Guardia costera estadounidense ha desplegado 6 aeronaves y 18 barcos de rescate, así como 16 helicópteros, para las operaciones en la zona devastada.
Añadió que esta misma mañana habló con el teniente coronel de la Guardia Costera, Christopher Hooper, encargado de dirigir las operaciones de búsqueda, quien le aseguró que “nadie descansará” hasta finalizar las operaciones de rescate.
Por otro lado, Biden aseguró que hay hasta 44.000 empleados de todo el país trabajando por conseguir devolver el servicio eléctrico a los territorios afectados.
“En momentos como estos Estados Unidos debe estar unido, dejar a un lado la política y la división”, dijo el Presidente.