Llegó ya el momento de crear una especie de manual convencional de ética que sea válida para todos los pueblos, naciones e individuos, independientemente de cuales sean sus creencias religiosas, inclinaciones políticas, ideológicas, raza, color, idiosincracia, condiciones sociales y económicas que les distingan.
El primer paso en la dirección correcta a tomar es asumir determinados compromisos básicos, los cuales el Parlamento de Religiones del Mundo ( Liga sobre la cual nos referiremos en alguna otra ocasión más adelante), los ha pergeñado en el siguiente órden:
A) NO-VIOLENCIA, DIGNIDAD y RESPETO EN EL TRATO. El respeto ha de observarse en todos los ámbitos u momentos en la cotidianidad, muy señaladamente, lo que tiene que ver con la fe y las creencias religiosas de la gente. Este respeto por la religión que cada comunidad o persona profese debe estar enmarcado dentro de la virtud de tolerancia absoluta que nazca de una convicción de que todas las religiones son válidas, revelan la verdad de Dios y procuran la salvación de las almas y el porvenir que les espera. En ese orden de ideas, se debe partir de que cada quien es libre de creer y tener fe en Dios de la manera como mejor le parezca, por lo que no deben haber credos que salvan y otros que condenen. Cada quien se salva cumpliendo con los mandamientos de la fe que profese. De los diccionarios religiosos deben desaparecer palabras como ortodoxia, heterodoxia, herejías y toda expresión que crea separabilidad, odio, menosprecio, presencia de dogmas de fe; incitación al odio contra judíos, musulmanes, taoístas, budistas; gnósticos, sikhs y cosas por el estilo.
No se trata de subsumir todas las regiones del mundo en una sola, sino en respetar las creencias religiosas de los demás. ¿Razones? Dios no es sectario ni fundamentalista: Dios es Amor Universal y Luz que disipa las tinieblas de todo aquel que observe a cabalidad los Mandamientos. La clave esencial para alcanzar este propósito es: AMOR- BONDAD- INEGOISMO – JUSTICIA- NO-VIOLENCIA.
La No-violencia incita a la tolerancia, la aceptación de la diversidad como algo natural y normal, por lo que debe quedar prohibido causarle sufrimiento, dolor,, tortura y muerte a ninguna criatura, al mundo vegetal y animal, al medio- ambiente.
Todo esto está inclusive estatuido en los diversos Textos Sagrados, sermones y servicios de todas las religiones y filosofías; tales como hinduismo, budismo, confucianismo, taoismo; judaísmo, estoicismo, sikh, drusos, las máximas éticas de Jesús de Nazareth predicadas en el sermón del monte, entre muchos otros.
B) SOLIDARIDAD. Este precepto nos enseña que nos debemos los unos a los otros de muchas maneras, por lo que no se puede ignorar o pasar por alto el sufrimiento y la exclusión de los que poco o nada tienen, y los que afrontan serias necesidades.Tenemos que ser de algún modo y en la manera más frecuente posible, buenos samaritanos como el de la parábola del Maestro Divino Jesús, siendo siempre conscientes que el bienestar y la seguridad de los que tienen y viven cómodamente es directamente proporcional a la seguridad y el bienestar de los que poco o nada tienen.
C) UN ÓRDEN ECONÓMICO JUSTO.
Este postulado enseña que la economía debe estar al servicio de la población entera y no en manos de monopolios y grupetes de explotadores, contrabandistas, mafiosos y acaparadores. Los beneficios se contabilizarán y repartirán según el monto de la inversión que cada quien haga, de la capacidad técnica y obrera, la experiencia y la especialidad ( el know-how) que se tenga; la responsabilidad y la competencia que se demuestre. Queda prohibida la explotación del trabajador y el obrero; los abusos en los horarios laborales, retraso en el pago de sueldos, salarios, y y muy puntualmente, la mala fe, deslealtad es; el abuso descarado de los sindicalistas y la sustitución de la dictadura del patrono por la dictadura del proletariado. Un NO ROTUNDO a todo lo que tenga que ver con dictaduras!
D) Como derivado o consecuencia de la libertad que cada persona tiene de elegir el credo religioso que más le parezca creíble , convincente o consono con sus intereses y proyectos políticos y económicos futuros, es inaceptable todo tipo de imposiciónes de creencias religiosas por vías distintas a la de la convicción personalisima de cada uno. El libre culto debe ser tomado en consideración como un derecho inalienable de cada individuo de escoger la fe que más le convenza y llene su alma. Esto conlleva a la eliminación de todo tipo de imposiciones religiosas forzosas entre los pueblos y las comunidades en aras proselitistas con el fin de abultar el número de fieles de una fe determinada por motivaciones políticas ( alcanzar a largo o mediano plazo una superioridad numérica) . Es el caso de la fe Islámica que en Europa ordena a las familias de fieles tener una numerosa prole para con ello superar en números a la fe cristiana en familias que procrean uno o dos vástagos, a lo sumo. De mantenerse esta situación como lo es hasta ahora, en cuestión de 15 o 20 años, Europa será un continente totalmente musulmán regido por la Sharia, Ley Islámica que es contraria a las legislaciónes civiles de cada país del viejo continente.
Surgen con lo que hasta ahora hemos apuntado, algunas interrogantes de gran importancia, tales como: ¿ Es factible la creación de una ética global en medio de tanta diversidad de intereses contradictorios, muchos de ellos considerados por las partes como «puntos de honor no negociables?»
¿ Se puede construir únicamente a partir de los Derechos Humanos, una ética válida para toda la humanidad?
La respuesta a tales interrogantes formuladas es un ROTUNDO NO. No es posible hacer eso. Veamos el por qué: El citado filósofo Hans Kung, puntualiza: «Habrá que distinguir entre el ámbito del derecho y el de la ética, puesto que esta ultima – la ética-, no se agota en el derecho, siendo ésta cuestión algo muy importante a la hora de estudiar el tema de los derechos humanos, tan en boga en estos tiempos debido a las reiteradas violaciones de los mismos y la proliferación de crímenes de lesa humanidad.
Ambas esferas – la del ámbito del Derecho y el ámbito de la Ética- , mantienen una múltiple correlación. Tanto el nacimiento de esos derechos como la realidad y su funcionamiento, presuponen una actitud ética válida para toda la humanidad.»
Textualmente Kung acota: » De los sólos derechos humanos, por fundamentales que sean para el hombre, no puede derivarse ninguna ética global de la humanidad extensible a los deberes pre- jurídicos del hombre.
Previamente a toda fijación jurídica y a la legislacion del Estado; existe una autonomía moral y la responsabilidad consciente de la persona, a la que no sólo se hallan ligados derechos, sino tambien deberes fundamentales.
De lo expresado se deduce que derecho y actitud ética no son lo mismo; y que incluso a veces colidan. El Derecho más bien necesita de un fundamento moral para que pueda hacer valer la justicia. Kung lo pauta en forma tajante: » UN ORDEN MORAL IDEAL NO PUEDE FORZARSE NI CREARSE CON LEYES, CONVENCIONES Y REGLAMENTOS «.
De igual forma, el compromiso a favor de los derechos humanos presupone una conciencia de la responsabilidad y los deberes, y ello concierne por igual a la mente ( pensamientos y voluntad) y el corazón ( sentimientos y emociones).
A largo plazo, el derecho no tiene consistencia alguna sin una actitud ética mundial.
Como corolario de lo hasta ahora expuesto, se puede enunciar lo siguiente:
1) Una política carente de ética deriva en injusticia social, tiranías, dictaduras y autoritarismos carentes de toda moral ( caso Venezuela; Cuba, Nicaragua, entre otros);
2)Una religión carente de ética de alcance universal, deriva en dogmatismo sectario y fanático;
3)Una economía sin ética, vale decir, carente del sentido de crear bienestar y dignidad para todos, desemboca en la explotacion de los pueblos y miseria;
4) Una educación carente de ética; desemboca en ideologizaciones y en mantener a los pueblos incultos para así poder someterlos con facilidad y enaltecer los antivalores y el proselitismo que algunas sociedades totalitarias o democracias imperfectas les interesa fomentar;
5) Un órden militar o policial que se aparte de la sagrada mision de defender la soberanía nacional de la patria que le vio nacer y resguardar la seguridad personal y la propiedad privada de la gente, desemboca en el abuso de poder y la comisión de delitos de peculado y robo de la riqueza nacional
¿Por donde comenzar? Por purificar la mente y el corazón; con el fin de obrar en forma inegoista, con desapego, mucha mística, rectitud, honestidad; coherencia , buena volundad,, conjugado y priorizando todo ello con Amar a Dios, al país y al prójimo como a uno mismo.
¿Es fácil o difícil?
La respuesta la tiene la conciencia individual de cada quien!
@kaledyorde
