Luna ha subido un 60% en los últimos siete días, según los precios de CoinGecko, convirtiéndola en la duodécima mayor criptomoneda.
El token Luna, de Terraform Labs, está pasando a convertirse en una de las mayores criptodivisas en medio de los cambios en cómo se usa la moneda para su red de pagos en la blockchain y el optimismo sobre el potencial de las aplicaciones descentralizadas.
Luna había subido un 60% en los últimos siete días hasta el viernes, según los precios de CoinGecko, convirtiéndola en la duodécima mayor criptomoneda con un valor de mercado de unos US$25.000 millones. La subida se produce mientras Terraform, con sede en Singapur, está inmersa en una disputa con la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC por sus siglas en inglés) sobre si la plataforma está vendiendo valores no registrados.
El protocolo de Terra despliega stablecoins (monedas estables) algorítmicas, con paridad fiduciaria (tokens que pretenden vincular su valor a un activo como el dólar estadounidense) para apuntalar un ecosistema financiero descentralizado (DeFi). Este ecosistema incluye aplicaciones como Anchor, Pylon y Mirror Protocol. Mirror Protocol, de Terraform, desencadenó la investigación de la SEC al ofrecer tokens digitales que reflejan acciones cotizadas en Estados Unidos.
“Las criptomonedas se basan en la creación de ruido, y el ecosistema de Terra está recibiendo mucha atención, ya sea por la innovación de DeFi, los productos de stablecoin, la reciente actualización de la red o el staking de Luna”, dijo Antoni Trenchev, cofundador del prestamista de criptomonedas Nexo. Es “la nueva sensación en el espacio de las criptomonedas, siguiendo los pasos de otras blockchains como Solana y Avalanche, todas las cuales han sido testigos de ganancias explosivas en el último año”.
Recientemente se aprobó una propuesta de gobernanza para la red que consiste en destruir, o quemar, unos 88 millones de Luna del fondo comunitario, cambiándolos por UST, la stablecoin de Terra. La propia UST tiene ahora un valor de mercado de US$7.700 millones, frente a los US$2.900 millones del 10 de noviembre. Los desarrolladores de criptodivisas suelen quemar monedas para aumentar la escasez.
“La economía de Luna está construida para ser deflacionaria, y en el último mes hemos visto 100 millones de tokens de Luna ser quemados, lo que los elimina de la oferta para siempre”, dijo Hayden Hughes, CEO de Alpha Impact, una plataforma de comercio social. “Esta reducción de la oferta, combinada con la popularidad del staking de Luna (donde los participantes en el staking obtienen nuevos tokens) ha creado un shock de oferta que ha hecho subir el valor”.
Además muchos reguladores a nivel mundial, incluso en Estados Unidos, han expresado su interés en impulsar el marco regulatorio en torno a las stablecoins.
“Casi todo lo que hacemos como empresa apoyando el ecosistema de Terra y los proyectos de terceros que construyen y desarrollan crea más demanda de UST, cerrando el ‘bucle de la demanda’ con muchos casos de uso para UST que van desde los pagos, a los ahorros, y la inversión”, dijo Brian Curran, jefe de comunicaciones de Terraform Labs. “Como resultado, la dinámica del precio de Luna es principalmente una función de la demanda de UST, y por extensión, la demanda de uso de UST a través de varias aplicaciones y blockchains”.
Luna también puede estar recibiendo un impulso ya que los llamados puentes de cadena cruzada (cross-chain bridges, en referencia a la blockchain) como Wormhole han comenzado a ganar tracción y están permitiendo a Terra exportar UST a otras redes de blockchain donde es compatible. Además, Terra ha iniciado algunas asociaciones para juegos del Metaverso, con nombres como Summoner’s War. Terra ocupa el quinto lugar en las cadenas de contratos inteligentes por valor total, con unos US$12.600 millones, según DefiLlama.
Bloomberg