Los cardenales apuestan por que el cónclave para elegir al sucesor de Francisco, y que comenzará el 7 de mayo, será breve, de dos o tres días, según comentan a su entrada en las congregaciones generales que servirán para individualizar una figura que pueda aglutinar consensos.
«Será breve, dos o tres días. Tengo las ideas claras. Yo sé a quién votar. Hay un clima de fraternidad y de espíritu de responsabilidad. No se puede volver atrás», explica el cardenal Raphael Sako, patriarca de los caldeos entrando este martes en la sexta congregación.
El cardenal arzobispo de Santiago del Estero, el argentino Vicente Bokalic Iglic, también espera «que sea pronto» la elección del nuevo papa.
Mientras que el salvadoreño, Gregorio Rosa Chávez, aunque a sus 82 años no entrará en la Capilla Sixtina, asegura al llegar al aula del Sínodo que la impresión es que «será corto, de dos o tres días».
La única opinión discordante en estos días ha sido la del cardenal sueco Anders Arborelius: «Creo que será un cónclave largo, tenemos que conocernos. Hay muchos cardenales nuevos y hay que conocerse», afirma.
El cardenal Gualtiero Bassetti, también mayor de 80 años, opina que «será un cónclave breve, entre los cardenales hay unidad», según declara al diario «Corriere della Sera».
El cónclave más largo de la historia fue el que condujo a la elección del Papa Gregorio X, que duró 18 meses, del 1 de marzo de 1271 al 1 de septiembre de 1272.
Y el cónclave más breve del que se tiene constancia se celebró en la noche del 31 de octubre al 1 de noviembre de 1503: duró solo unas diez horas. Tras la muerte de Pío III, los cardenales se reunieron y en un tiempo récord nombraron a Julio II, nacido Giuliano della Rovere (1443-1513).
Agencias