Naciones Unidas hizo este martes un llamado a las autoridades de México, para que lleven a cabo una «investigación exhaustiva» sobre el incendio registrado en el Instituto Nacional de Migración de Ciudad Juárez, en el estado de Chihuaha, en el que han fallecieron al menos 40 migrantes.
Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, emitió un comunicado en el que reitera el compromiso de la organización para seguir trabajando en el establecimiento de «vías de migración más seguras, reguladas y organizadas».
«El secretario general lamenta profundamente la muerte de al menos 40 personas en un incendio ocurrido anoche en un centro migratorio mexicano en Ciudad Juárez. Transmite su más sentido pésame a las familias y seres queridos de los fallecidos y desea una pronta recuperación a los heridos», expresó Dujarric.
Previamente, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, lamentó el «muy triste» incidente, aseguró que fueron las propias víctimas quienes iniciaron el fuego al prender colchonetas en la puerta del albergue como señal de protesta por una supuesta futura deportación.
Aunque en un primer momento las autoridades informaron que el incidente dejó 37 fallecidos, más tarde se actualizó las cifras a 40 muertos y otros 29 heridos. Las autoridades migratorias de Guatemala han confirmaron que 28 de los muertos eran de nacionalidad guatemalteca.
El Instituto Nacional de Migración (INM) informó que los migrantes identificados, muertos o heridos, son de las siguientes nacionalidades: un colombiano, un ecuatoriano, 12 salvadoreños, 12 venezolanos, 13 hondureños y 28 guatemaltecos.
Europa Press