Los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro se habrían valido de Caribbean Style Inc., una empresa registrada en el estado Texas, para triangular y pagar los gastos de viaje, logística de sus agentes, así como de propaganda política de sus gobiernos en Estados Unidos. Tales erogaciones se harían a expensas de CITGO, la filial de Petróleos de Venezuela S.A. en la nación norteamericana, en una trama que busca enmascarar las operaciones irregulares.
Tales acciones se seguirían llevando a cabo a pesar de las denuncias que al respecto se han formulado en diversas ocasiones, aun con la nueva administración de la filial de PDVSA en territorio estadounidense.
Estos hechos tienen tiempo denunciándose y así lo refiere el blog “Las armas del Coronel” hace referencia a una denuncia formulada por Joaquín Chafardett sobre la Fundación Simón Bolívar de CITGO presidida por Gustavo Cárdenas, la cual presuntamente aparejaba a cada donación que otorgaba, toda una estrategia de logística que recaía en Caribbean Style Inc[1].
El escrito de Chafardet se publicó inicialmente en el portal Analítica donde ya no es posible ubicarlo y sólo puede accederse a él, bien a través de la referencia que hace Gustavo Coronel en su blog cuando hace mención a varias de las irregularidades cometidas en la filial de PDVSA en EE. UU., o de Google Groups[2].
La denuncia refería que las operaciones irregulares dirigidas por Cárdenas, contaban con la colaboración del vicepresidente de Asuntos Públicos de CITGO, Daniel Cortez. Agrega que, supuestamente, Modesto Díaz, presidente de Caribbean Style, sería testaferro de Cárdenas y Cortez.
Se precisa que la logística para todos los programas de la Fundación Simón Bolívar era prepagada a Caribbean Style independientemente de si los gastos se ejecutaban o no.
Se cita como ejemplo que las medicinas que CITGO compró para Hugo Chávez cuando estaba enfermo, supuestamente fueron adquiridas a través de Caribbean Style Inc, a la cual se le pagaron con antelación un millón de dólares por gastos de logística.
Asimismo, hace mención a una donación hecha por FSB consistente en 200 implantes auditivos que serían donados en Venezuela, se habría hecho con un presunto sobreprecio de USD 800.000 y siempre con la intermediación de Caribbean Style. A la fecha de la publicación solamente 30 de estos implantes se había entregado a personas afectadas.
CITGO también habría pagado USD 2 millones a Caribbean Style a través de la fundación para cubrir los gastos de logística cuando se encargó que canalizar una donación de USD 6 millones para los afectados por las lluvias en Venezuela. Igualmente se menciona una donación de USD 2.5 millones a Haití contempló gastos de logística cancelados a la referida empresa por USD 800.000. En este caso, en razón de que no había autoridad que controlara la entrada de las donaciones, se habrían facturado productos que no fueron comprados y se canceló una carga que no llegó a la nación caribeña.
Advertía Chafardett que en la “ayuda” brindada por CITGO a los damnificados de las lluvias en Venezuela como a los afectados por el terremoto en Haití, el negocio estaba en la sobrefacturación de los costos de transporte aéreo, habiendo canalizado Caribbean Sytyle Inc tales envíos a través de una empresa llamada Transporte Aéreo Boliviano (TAB).
La denuncia de Joaquín Chafardett incluía el caso de una exposición denominada “Venezuela Matters”, evento que en realidad no se llevó a cabo pero sí fue facturado por una empresa de nombre Nexus, hecho que ocurrió, presuntamente, con la aprobación de Cárdenas quien ordenó el pago de todo lo relacionado con la logística de la exposición. En todo caso —refiere la narración— que el presidente de la FSB habría advertido el jugoso negocio y decidió crear su propia empresa a través de un prestanombres quien, a saber, habría sido Modesto Díaz. Así habría surgido Caribbean Style Inc.
Los hechos irregulares se cuentan por docenas, sin que haya una efectiva investigación sobre los mismos que desemboque en el establecimiento de responsabilidades y la consiguiente sanción y castigo. Para evadir los controles, Chafardett precisó que Cárdenas y Cortez contaban con la presunta complicidad del auditor general de CITGO para la época, a quien no identifica, y de uno de los consultores jurídicos de la filial, Arnaldo Arcay, cuya función era evitar que el resto de los consultores pudieran tener acceso a los contratos de logística. (Arcay ya no está en CITGO).
Operando a pesar de las detenciones directivos de CITGO
Gustavo Cárdenas fue detenido junto con otros cinco directivos de CITGO en noviembre de 2017 por orden del fiscal designado por la Asamblea Nacional Constituyente, Tarek William Saab, acusados de firmar un contrato internacional con dos empresas financieras con las que estarían negociando una refinanciación de los programas de deuda de CITGO entre los años 2014-2015 y así solicitar préstamos que resultaban desfavorables para PDVSA[3].
Los detenidos fueron José Ángel Pereira Ruimwyk (presidente interino de Citgo), Tomeu Vadell (vicepresidente de refinación), Alirio Zambrano (vicepresidente y gerente general de la refinería de CITGO en Corpus Christi), Jorge Toledo (vicepresidente de suministro y marketing), Gustavo Cárdenas (jefe de relaciones estratégicas con accionistas, gobierno y asuntos públicos) y José Luis Zambrano (vicepresidente de servicios compartidos). A ellos el Tribunal Supremo de Justicia oficialista ordenó abrirles juicio por su pretensión de supuestamente comprometer a CITGO con las empresas financiadoras Frontier Group Management Ltd y Apolo Global Management. También mantuvo la medida de privación de libertad preventiva de estos exdirectivos, imputados por peculado doloso propio, concierto de funcionario con contratista, legitimación de capitales y asociación para delinquir[4].
CITGO, el activo más valioso de Venezuela en el extranjero, se ha convertido en objeto de disputa entre el gobierno de Nicolás Maduro y Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional reconocido como presidente interino de Venezuela por Estados Unidos y más de 50 países. Así, mientras Maduro sostiene que el presidente de CITGO Petroleum Corp es Asdrúbal Chávez —primo del fallecido expresidente Hugo Chávez y aliado cercano del mandatario venezolano al que EE. UU. le retiró la visa— Guaidó designó una nueva junta directiva de la filial que encabeza Luisa Palacios, acompañada de Rick Esser, Edgar Rincón, Ángel Olmeta, Luis Urdaneta y Andrés Eloy Padilla[5].
Pese a esto y a la licencia que el gobierno de los Estados Unidos ha otorgado a Guaidó y sus designados, en el seno de la CITGO seguirían operando funcionarios que han sido y continuarían siendo fichas de los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro. Tal sería el caso de Glenn Hilman, vicepresidente de Servicios Compartidos, quien en mayo de 2018 cuando se desempeñaba como director de compras, junto a los gerentes Brian Paulson y Laymar Peña, apoyaron la compra de vehículos blindados autorizados por el entonces CEO de Citgo, Asdrúbal Chávez y Manuel Quevedo, presidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA). Igualmente, participó de decisiones que permitieron la compra de 8 mil millones de dólares en bienes, equipos y repuestos con dinero proveniente de la venta de petróleo venezolano a CITGO. Igualmente, Rick Esser ignoró las políticas internas para la compra de los referidos vehículos blindados. Se cree que los carros estaban destinados para uso de altos funcionarios del régimen de Nicolás Maduro o para actividades ilegales como el narcotráfico o la explotación ilegal de oro y coltán[6].
Fuentes consultadas para la redacción de esta noche refieren que Glenn Hilman mantiene excelentes relaciones con Asdrúbal Chávez y que Rick Esser, actual vicepresidente de cumplimiento y director de estrategia, habrían mantenido una gestión caracterizada por las irregularidades que comprometieron el presupuesto de CITGO haciéndole perder millones de dólares.
Del mismo modo se asegura que la gestión de Luisa Palacios y el resto de la junta directiva han hecho caso omiso a las denuncias que les han presentado trabajadores en varias oportunidades, habiendo recibido, lejos de receptividad, amenazas por parte del equipo de abogados externos contratados por este directorio.
Las irregularidades de Caribbean Style Inc serían parte de las denuncias desestimadas por las nuevas autoridades de CITGO.
Sobre Caribean Style Inc
El portal Manta refiere que Caribean Style Inc. es una compañía registrada en Houston Texas, cuyo domicilio es el 2350 Bering Drive Apartment 110, Houston, Tx 77057. Teléfono (832) 5338822. Modesto Díaz es el Presidente y Director Ejecutivo.
Informa que se trata de una compañía privada dedicada a la promoción de entretenimiento establecida en 2001[7].
Por su parte, Sunbiz informa que Caribean Style Inc[8] también es una empresa registrada el 19 de agosto de 1996 en el estado de la Florida bajo el número P96000069647, FEI/EIN 65-1132582. Su estatus actual es inactivo, al haberse disuelto administrativamente el 16 de septiembre de 2005.
Reportó como dirección el 9300 NW 25 Street, STE 208, Miami, Fl 33172, que también fue suministrada como dirección postal.
El agente registrador fue Gustavo Villoldo (misma dirección de la empresa), quien asumió como tal desde el 13 de junio de 2002.
En el directorio de la empresa figuraban Raúl Llaneras y Gustavo Villoldo, igualmente con mismo domicilio de la empresa.