Luego de negar al mundo su participación Rusia terminó confirmando el ataque y destrucción de las infraestructuras militares en Odesa, una zona vital para la exportación de granos ucranianos, lo que provocó la indignación de Ucrania y de sus aliados.
El presidente ucraniano Volodimir Zelenski calificó los ataques con misiles sobre el puerto de Odesa de «barbarie rusa», un día después de la firma en Estambul de un acuerdo entre ambos países para desbloquear las exportaciones de cereales. Turquía aseguró el sábado haber recibido garantías de que Rusia no tenía absolutamente nada que ver con el ataque con misiles de crucero.
Este ataque pone en riesgo el histórico acuerdo firmado entre Rusia y Ucrania tras meses de negociaciones, y que podría aliviar la crisis alimentaria mundial
24 horas después de la firma de un esperanzador acuerdo que buscaba garantizar la salida de los granos de Ucrania, Rusia atacó el puerto de Odesa, lo que volvió a generar una gran incertidumbre sobre la posibilidad de reanudar las exportaciones de cereales de Ucrania. Por eso, Estados Unidos anunció que ya evalúa un “plan B” para permitir la salida de esos productos del país invadido por Moscú.
Además, la petrolera rusa Gazprom anunció que reducirá desde este miércoles el flujo de gas a Europa por nuevos trabajos de mantenimiento del gasoducto Nord Stream 1.