Venezuela se encamina a una transición democrática inédita, la decisión de la comunidad internacional de establecer nuevos lapsos para terminar el gobierno de Nicolás Maduro, obliga hacer unos ajuste acerca de los eventos por venir, véase los escenarios posibles de ocurrencia; estables, inestables y de caos .
El escenario estable se refiere a un escenario donde los actores funcionan bajo el principio de parsimonia que indica que en igualdad de condiciones se selecciona la alternativa más fácil de ejecutar o de mayor confort para los actores. En el caso del gobierno de Nicolás Maduro, su objetivo central es culminar el periodo presidencial y evitar el derrumbe o debilitamiento del PSUV como partido de masas.
De acuerdo, con este objetivo la acción de gobierno estará signada en el último cuatrimestre por presentar todos los obstáculos legales y acciones políticas dirigidas a erosionar la imagen de la Oposición, liderada por Juan Guiado, y lograr aplazar la realización de las elecciones generales con supervisión y vigilancia internacional.
En tal sentido, conscientes de la situación de descontento popular, la cúpula del PSUV no tiene en su agenda política programada ninguna elección, salvo las elecciones parlamentarias sin participación opositora, de seguro Nicolás Maduro apostará solo a un escenario de estas eleccionesen el 2020.
La condición para que la realización de este escenario estable se cumpla pasa por una mejora de la situación económica actual, poco previsible con la destrucción de PDVSA y al mismo tiempo que implica al menos; mayor abastecimiento, freno a la inflación galopante, enfrentar la inseguridad y detener los problemas de calidad, precio y frecuencia de los servicios públicos tales como; el suministro continuo del agua potable, generación de energía eléctrica y telefonía residencial y celular.
Este escenario estable, el papel de la G4-oposición su apuesta es superar la situación de apoyo pasivo de la mayoría que acompaña a Juan Guaido desde enero de este año. Sin embargo, se evidenca que la oposición cuenta con una baja capacidad de movilización de sus adeptos (aunque parece tener su respaldo). Al mismo tiempo, el G4 lucha INCANSABLEMENTE por la salida del gobierno usurpador de Maduro apoyado por Vladimir Padrino López, sin embargo se ha mantenido en el poder muy a pesar de las sanciones impuestas por USA, se ha generado en el ciudadano común un alto desencanto, por su nula incidencia en la situación país, tan complicado para la mayoría de las familias.
El escenario inestable está en pleno desarrollo, que lo sintetiza el desconocimiento del gobierno de Nicolás Maduro y los poderes constituidos por el chavismo, al margen de la Asamblea Nacional electa popularmente. Esta situación lleva a Venezuela al caos institucional; lo evidencia la acción política del ejecutivo nacional de anular a la Asamblea Nacional, poniendo en peligro su propia funcionalidad , toda vez que los asuntos estratégicos del Estado dependen del funcionamiento de la Asamblea Nacional según la Constitución vigente .
Ahora bien, la representación de la Asamblea Nacional debe cumplir su papel de órgano legislativo legítimamente electa por el poder popular, pero, al mismo tiempo debe propiciar el dialogo y la negociación política esa debe ser estrategia inevitable a seguir, es absolutamente necesario se incorporen al dialogo todos actores políticos opositores, justamente en los escenarios de alta confrontación se hace fundamental la negociación política esta debería ser su apuesta.
Es de hacer notar, que debe lograr la unión de la mayoría de los actores políticos y de la sociedad civil. Venezuela está encaminada a un proceso de transición inédita inevitable pero requiere del mayor consenso posible ,para poder transitar el camino de una eventual salida del gobierno usurpador de Maduro.
El escenario del caos explica que el resultado de algo depende de distintas variables y que es imposible predecir, el futuro no está escrito en ninguna parte. Sin embargo, se pueden construir algunos escenarios, muy a pesar de estar hoy inmersos en un entorno político de muy alta incertidumbre y de alta incertidumbre económica, en este escenario del caos se puede desatar una conflictividad mayor , si se renuncia al dialogo, a la negociación y a la mediación como herramientas básicas de la acción política y si se sigue apostando a la confrontación con agendas ocultas y sin proyecto país viable y sostenible, la crisis institucional será cada día más profunda y todos los sectores sociales seguirán pagando muy caro la falta de entendimiento e incomprensión política de los actores predominantes en la sociedad venezolana actual.
Este escenario de caos, pueden explotar eventos sorpresas, como la aparición de fuerzas sociales emergentes con o sin proyecto político. Hoy en todas las encuestas aparecen un 30 % a 35% de ciudadanos que demandan nuevas opciones políticas, que atiendan sus necesidades y expectativas de bienestar y seguridad integral . También se pueden generar divisiones en las formaciones políticas actuales que compliquen más aun la situación política. Sin duda, se está en una situación de pronóstico reservado.
MG. EGNO CHAVEZ
PROFESOR TITULAR DE LUZ Y CONSULTOR POLITICO.