Los Tampa Bay Rays se despidieron de la temporada 2021 de MLB al caer por tercera jornada consecutiva ante los Boston Red Sox en un resultado que para muchos fue una sorpresa, afirmación que pudiera ser contrastante si comparamos la nómina salarial de cada uno.
Pero que se sustenta por lo alcanzado por ambos en la temporada regular donde los de la Bahía, ganaron 100 juegos la tercera mejor cifra del béisbol, mejor de la liga americana, solo superada por los San Francisco Giants 107 y Los Ángeles Dodgers 106.
Por si esto fuera poco el sistema de ligas menores de los Rays fue el mejor por mucho de todo el béisbol organizado, razones por las que sus métodos de scouteo y seguimiento de los peloteros son en estos momentos el modelo a seguir por el resto de las 29 organizaciones que integran el béisbol de Grandes Ligas.
Los Rays han sido exitosos también gracias a lo ya comentado cada vez que han ido al mercado obteniendo peloteros que han sido de gran ayuda como el cubano Randy Arozarena, su compatriota Yandi Díaz, Austin Meadows, Drew Rasmussen, Manuel Margot y Mike Zunino, todos con papel protagónico en esta campaña, en la que la Diosa fortuna los abandonó en el momento menos indicado como sucedió en el 13 Innings del juego tres de la serie, cuando una jugada fortuita pudo haber cambiado el destino de la serie al evitar que los Rays se fueran arriba en el marcador.
No es nuestra intención restarle méritos al triunfo de los Red Sox, quienes con su ofensiva eclipsaron al mejor pitcheo colectivo de la liga en tres encuentros corridos, pero para siempre quedará la duda de que hubiese pasado si los Rays llegaban a la parte baja del fatídico episodio 13, con ventaja en la pizarra.
Los puristas del béisbol pueden no concordar con su estilo de juego pero sus innovaciones han llegado para quedarse, por ejemplo el abridor “opener” es una figura utilizada hoy por el resto de los 29 equipos, durante la temporada regular y en algunos casos en la Post Temporada.
Aunque después del primer juego de la serie está no funcionó porque los resultados fueron opuestos, siempre amigo lector en el béisbol, donde no existen los empates o se gana o se pierde, y el equipo rival también usó como opener al venezolano Eduardo Rodríguez y fortaleció su bullpen con abridores en la temporada regular como Nick Pivetta de gran actuación en la serie, Garret Richards y Tanner Houck, en lo que sin duda acertaron.
Quizás el manager de Tampa Bay Kevin Cash, no sea un estratega que use mucho el librito pero nadie puede negar que ha sido mucho más exitoso, que su predecesor Joe Maddon y la organización tendrá que hilar muy fino para mantenerlo en el futuro.
Preocupación que se une al gran problema del equipo, la poca asistencia al Tropicana Field, aunado a la limitación de tener que cumplir con un contrato de arrendamiento que los ata, hasta el 2027, y que pudiera dejar a la Florida Central en un futuro sin uno de sus equipos el más brillante y de más futuro si no ceden las autoridades. Habiendo anunciado ya el equipo que para 2028 planea dividir su sede entre Montreal y Tampa.
Por lo tanto como amante del buen béisbol no me queda otra que darle las Gracias a los Rays por estar marcando la pauta en el béisbol de las grandes ligas, a pesar de no haber conseguido el objetivo final de ganar la Serie Mundial, lo cual habria significado que la misma ciudad tuviera en el 2021, títulos en la NFL Buccaneers y NHL Lightings cuyas instalaciones son tan competitivas como las de sus contrapartes, no así la de los Rays.
Será hasta la próxima Dios Mediante, recuerden me pueden encontrar de lunes a viernes YouTube en nuestro canal Beathespreadbet, con noticias y pronósticos deportivos, para MLB, NBA, NFL, NHL, NCAA y Winter Baseball.
Antonio «Toño» Soler/ Hit&Run