Los beligerantes están armando las redes sociales entre sí y apuntándolas hacia sus propias poblaciones: desde el espionaje y la censura hasta la propaganda y la desinformación.
Mientras los misiles caen sobre Israel e Irán, los civiles se enfrentan a un segundo campo de batalla: el espacio en internet. Desde el comienzo de la ofensiva israelí, las herramientas de comunicación están cada vez más controladas, tanto para espiar al enemigo como para reprimir la disidencia. En Israel se han impuesto nuevas restricciones a la población. Mientras tanto, en Irán, acostumbrado desde hace tiempo a la censura, la represión ha alcanzado nuevas cotas.

FACT: Circula una imagen que muestra un edificio gravemente dañado con la afirmación de que representa la sede del Mossad atacada por misiles iraníes en Tel Aviv en medio de las tensiones en curso entre Israel e Irán.
Las redes sociales como fuentes para los servicios de inteligencia
Durante el ataque del 7 de octubre de Hamás contra Israel, uno de los objetivos fue la base militar de Nahal Oz. Una investigación publicada en marzo reveló que el asalto fue posible en parte gracias a las publicaciones en las redes sociales de los propios soldados, que permitieron a Hamás trazar el plano de las instalaciones. Desde entonces, los soldados israelíes tienen prohibido hacer fotografías en el interior de las instalaciones de las FDI o utilizar plataformas como Facebook. El objetivo es impedir que los enemigos creen perfiles de inteligencia. Incluso está prohibido documentar actos como ceremonias o reuniones con civiles.
Un artículo de la Universidad de Stanford explica cómo las redes sociales pueden ofrecer una ventaja táctica a los adversarios: «El fenómeno del ‘geoetiquetado’ -el proceso de añadir metadatos de identificación geográfica a diversos medios de comunicación- es especialmente delicado, ya que puede revelar ubicaciones específicas de unidades militares o poblaciones civiles vulnerables». Añade que las redes sociales son un arma de doble filo en la guerra moderna: «Si bien pueden ofrecer un salvavidas y una plataforma a algunos, también presentan un importante recurso de inteligencia para otros.»
El miércoles, el censor militar de Israel, general de brigada Kobi Mandelblit, advirtió de que cualquiera que comparta detalles sobre la localización de ataques -incluso a través de las redes sociales, blogs o aplicaciones de chat- debe someter el contenido a revisión previa o enfrentarse a acciones judiciales.
Irán también es muy consciente de estos riesgos. El sábado, la Guardia Revolucionaria emitió un comunicado en el que advertía de que cualquier «intercambio de información» que se percibiera como una ayuda a Israel se castigaría con las penas más duras, que podrían incluir publicaciones o imágenes en las redes sociales. Babak Kamiar, jefe de la redacción persa de ‘Euronews’, afirmó que el castigo máximo indicado en la sentencia es «la pena de muerte con toda seguridad».
La televisión estatal llegó a instar a los iraníes a borrar WhatsApp de sus teléfonos, alegando que la aplicación comparte datos de los usuarios con Israel. WhatsApp negó la acusación, afirmando que no rastrea la ubicación de los usuarios y que su cifrado de extremo a extremo garantiza la privacidad de los mensajes. En 2022, Irán bloqueó el acceso a WhatsApp y Google Play durante las protestas nacionales desencadenadas por la muerte de Mahsa Amini, de 22 años, mientras estaba detenida por la Policía. Las aplicaciones permanecieron inaccesibles durante más de dos años, hasta que se restableció el acceso en diciembre de 2024
Tomar el pulso a la población
Las redes sociales no son sólo una herramienta de espionaje, también sirven como barómetro político en tiempo real. «Ser capaz de rastrear el contenido de las redes sociales es un activo estratégico muy importante. En realidad, es un dispositivo de sondeo instantáneo», declaró a ‘Euronews’ Philip Seib, profesor emérito de Periodismo y Diplomacia Pública en la USC Annenberg School. «Las redes sociales del público pueden proporcionar algunas pistas sobre la intención de la población. ¿Se están uniendo en torno a su Gobierno?».
Las autoridades siguen de cerca estas señales. El sábado, la Policía israelí detuvo a un hombre en su casa después de que publicara una imagen de la bandera iraní, un emoji de saludo y un mensaje de apoyo. El lunes, el ministro de Seguridad Nacional de Israel, Itamar Ben Gvir, prometió tolerancia cero ante cualquier «expresión de alegría» por los ataques iraníes contra Israel. Seib también explicó cómo los Gobiernos extranjeros podrían estar observando de cerca estas señales. «Si yo fuera Donald Trump, querría vigilar de cerca esa situación. Por ejemplo, Netanyahu (el primer ministro israelí) podría pedir pronto más reabastecimiento de armas. Pero, ¿cuánto apoyo público tiene realmente en Israel?»
La verdad es la primera víctima de la guerra
La desinformación abunda en Internet, y este conflicto no es una excepción. En declaraciones a ‘Euronews’, Sahar Khamis, profesora asociada del Departamento de Comunicación de la Universidad de Maryland, afirma que la dinámica que se observó durante la guerra de Gaza se repite: la gente se informa más en las redes sociales que en los medios de comunicación convencionales y, por tanto, se ve sometida a la desinformación.
«La verdad es la primera víctima de la guerra», afirmó. Khamis señaló el uso de traducciones deliberadamente erróneas de los discursos de los líderes israelíes, imágenes generadas por IA de ataques con misiles e imágenes engañosas fuera de contexto. «Controlar la narrativa es una parte crucial de este conflicto. Ganar la guerra de la información importa casi tanto como ganar en el campo de batalla».
Durante anteriores escaladas en Gaza, Israel demostró sus capacidades de guerra digital. En 2023, su Ministerio de Asuntos Exteriores pagó anuncios con contenido gráfico, lenguaje emotivo e incluso vídeos generados por inteligencia artificial. Estas campañas difuminaron la línea entre los mensajes oficiales y las operaciones psicológicas. Algunas fueron retiradas por Google tras infringir las normas sobre imágenes violentas.
El equipo árabe de ‘Euronews’ descubrió varias historias falsas en internet, desde la afirmación de que un edificio del Mossad había sido bombardeado hasta un ataque iraní a la refinería de petróleo de Bazan, en Haifa, o el derribo de dos aviones por las defensas iraníes.
EuroNews
IRAN WAR: Iran released this video of Israeli jets being shot down by air defenses. It was taken by one of the nation’s best video game players using an Alienware computer. pic.twitter.com/zWX0eMZMLZ
— @amuse (@amuse) June 15, 2025