La Casa Blanca criticó este martes a la jueza que anuló la orden del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para revocar el programa migratorio que da un estatus legal a 530.000 venezolanos, cubanos, nicaragüenses y haitianos, conocido como ‘parole humanitario’, y adelantó que apelará la decisión.
La portavoz del gobierno estadounidense, Karoline Leavitt, señaló en una rueda de prensa directamente a la jueza Indira Talwani, de Massachussetts, calificándola de «rebelde».
«Otra jueza de distrito rebelde está tratando de bloquear los esfuerzos de deportación masiva del Gobierno», indicó la portavoz, que aseguró que «lucharemos en contra en los tribunales».
Además de su campaña para deportar a los más de once millones de migrantes indocumentados que viven en Estados Unidos, el Gobierno de Donald Trump ha decidido también arrebatar el estatus legal a decenas de miles de personas que llegaron al país bajo programas de migración legal promovidos por el expresidente Joe Biden (2021-2025).
A través del ‘parole humantario’, las personas en Cuba, Nicaragua, Haití y Venezuela podían solicitar desde sus países un permiso para viajar a EE.UU. y obtener un permiso de trabajo.
Trump ordenó revocar el programa el próximo 24 de abril, abriendo la puerta a la deportación de sus beneficiarios, pero la jueza, nominada por el expresidente Barack Obama, dictaminó que se debe respetar la fecha de vencimiento del ‘parole’, que se otorgó por un periodo de dos años.
El Gobierno de Biden instauró este programa en 2022 para venezolanos y en 2023 lo extendió a cubanos, nicaragüenses y haitianos, en un intento de ampliar las vías legales para migrar a Estados Unidos y reducir los cruces fronterizos irregulares.
En octubre de 2024, antes de las elecciones presidenciales, la Administración de Biden anunció que no renovaría el ‘parole’, lo que significaba que los beneficiarios no podían extender su estatus legal más allá de los dos años iniciales.
EFE