El Departamento de Estado de EE.UU. notificó formalmente al Congreso este viernes la disolución efectiva de la Agencia de los EstadosUnidos para el Desarrollo Internacional USAID y el traslado de algunas de sus funciones a ese departamento.
La reorganización se completará el 1 de julio, según informó el Departamento de Estado, lo que supone una sentencia de muerte para USAID, una agencia multimillonaria que combatió la pobreza y el hambre en todo el mundo.
Se espera que el cierre de una agencia establecida por el Congreso sin la intervención del Poder Legislativo genere impugnaciones legales.
El Gobierno de Trump ha acusado a USAID de malversar el dinero de los contribuyentes y financiar programas en el extranjero que no benefician a Estados Unidos. Empleados actuales y anteriores de USAID, así como expertos en ayuda humanitaria, han cuestionado esa información y afirmaron que la agencia, si bien imperfecta, satisface necesidades humanitarias vitales y refuerza el poder blando de EE.UU.
Agencias