Según informa Associated Press, un funcionario anónimo de la Guardia Revolucionaria paramilitar de Irán ordenó a un contacto en el mes de septiembre elaborar un plan para vigilar al republicano y, llegado el momento, matarle.
El Departamento de Justicia ha revelado este viernes la existencia de un complot iraní, que ha sido frustrado, para acabar con la vida del recién elegido presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en un atentado antes de las elecciones presidenciales celebradas esta semana. Asimismo, ha informado que ha presentado cargos federales contra tres personas relacionadas con la supuesta trama.
Según informa Associated Press, una denuncia presentada ante un tribunal federal de Manhattan alega que un funcionario anónimo de la Guardia Revolucionaria paramilitar de Irán ordenó a un contacto el pasado mes de septiembre elaborar un plan para vigilar al republicano y, llegado el momento, matarlo.
Dicho contacto se trata de Farhad Shakeri, a quien Irán, según la acusación, habría dado orden de asesinar a un ciudadano estadounidense de origen iraní en Nueva York, así como a Donald Trump. Mientras este sigue prófugo, sus dos cómplices Carlisle Rivera y Jonathon Loadholt, han sido detenidos.
En caso de que no pudiese llevar a cabo el plan antes de la celebración de las elecciones, el funcionario iraní le especificó que se pospondría hasta después de los comicios, dado que creían que Trump no iba a ganar y, entonces, sería más fácil asesinarlo, relata la denuncia.
AP