El multimillonario empresario tecnológico Elon Musk hizo un dramático pronóstico sobre las próximas elecciones presidenciales durante una aparición el sábado con Donald Trump, afirmando que el candidato republicano es el único que podría “preservar la democracia en Estados Unidos”.
Musk, el director general de SpaceX y Tesla, quien también compró X, se unió a Trump en Butler, Pensilvania, donde el expresidente sobrevivió a un intento de asesinato en julio. Ataviado con una gorra negra con el eslogan “Hagamos grande a Estados Unidos otra vez” (MAGA, por sus siglas en inglés) de la campaña de Trump, color que parecía reflejar el tono sombrío de sus declaraciones, advirtió que “estas serán las últimas elecciones” si Trump no gana.
“Como pueden ver, no soy sólo MAGA, soy el MAGA oscuro”, dijo.
Esta aparición marcó la primera participación de Musk en uno de los mítines característicos de Trump y representó la creciente alianza entre los dos hombres en la recta final de una reñida contienda electoral. Musk creó un enorme comité de acción política (PAC, por sus siglas en inglés) para apoyar al candidato republicano que ha estado gastando mucho en campañas de captación de votos durante los últimos meses de la campaña. Trump ha dicho que, en caso de volver a la Casa Blanca, le pedirá a Musk que dirija una comisión de eficiencia gubernamental.
Trump se reunió con Musk en agosto en una conversación pública poco habitual sobre X, una charla abrumadoramente amistosa que duró más de dos horas. En ella, el expresidente se enfocó en gran medida en el intento de asesinato de julio, en la inmigración no autorizada y en sus planes para recortar las regulaciones gubernamentales.
Ante una multitud el sábado, Musk trató de retratar a Trump como un defensor de la libertad de expresión, argumentando que los demócratas quieren “quitarles la libertad de expresión, quieren quitarles el derecho a portar armas, quieren, efectivamente, quitarles el derecho al voto”. Musk también criticó los intentos que se han hecho en California de prohibir las medidas que obligan a los votantes a portar documentos de identidad.
El acto de campaña del sábado tuvo lugar en la misma propiedad donde un francotirador abrió fuego, rozando la oreja derecha de Trump y matando a uno de sus simpatizantes, Corey Comperatore. Varias personas resultaron heridas en el tiroteo.
Varios miembros de la familia de Comperatore, así como otros simpatizantes y socorristas que estuvieron en el mitin de julio, volvieron al lugar el sábado. También aparecieron con el expresidente su compañero de fórmula, el senador republicano por Ohio JD Vance, su hijo, Eric Trump, su nuera y copresidenta del Comité Nacional Republicano, Lara Trump, junto con legisladores y jefes policiales de Pensilvania.
AP/ MEG KINNARD