En una medida que ha tomado por sorpresa a muchos, los bancos estadounidenses Wells Fargo y Citibank han comenzado a cerrar las cuentas de clientes venezolanos que hayan realizado transacciones a través de Zelle.
Estas instituciones financieras, sin previo aviso, se han decidido al considerar el uso de Zelle como una actividad potencialmente negativa, procediendo a sancionar a sus clientes independientemente del historial que estos tengan con los bancos.
Esta decisión ha generado inquietud entre la comunidad venezolana, que frecuentemente recurre a plataformas de pago electrónico como Zelle para realizar transacciones financieras, especialmente en un contexto de hiperinflación y control cambiario en Venezuela.
El cierre de cuentas sin advertencia previa y sin considerar el historial crediticio de los clientes ha sido percibido como una medida drástica y repentina.
Hasta el momento, ni Wells Fargo ni Citibank han emitido un comunicado oficial explicando los criterios específicos para el cierre de estas cuentas o si estas acciones forman parte de una política más amplia dirigida a la regulación de las transacciones electrónicas.
La falta de información y transparencia ha dejado a muchos afectados en busca de alternativas para sus necesidades bancarias y financieras.
Este suceso subraya la importancia de la comunicación clara entre las instituciones financieras y sus clientes, especialmente en lo que respecta a políticas que pueden afectar significativamente la operatividad y acceso.
La comunidad venezolana espera respuestas y soluciones que les permitan continuar realizando sus actividades económicas sin interrupciones.
Antonieta Jurado / El Nacional