Funcionarios y organizaciones civiles aplaudieron este jueves la expansión de un permiso migratorio a venezolanos, que fue anunciada anoche por la Administración del presidente de EEUU, el demócrata Joe Biden.
Daniella Levine Cava, alcaldesa del condado Miami-Dade, en el sur de Florida y donde se asienta la mayor comunidad de inmigrantes venezolanos en Estados Unidos, agradeció hoy que el Gobierno haya oído sus llamados para que se extienda y amplíe el Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés), que permitirá a 472.000 personas oriundas de ese país trabajar y residir legalmente en Estados Unidos.
Agregó que el sur de Florida es «un faro de esperanza para cientos de miles de familias que escaparon de la tiranía, la opresión, la guerra y las violaciones de derechos humanos», según recoge un comunicado.
Resaltó igualmente que muchos residentes de este condado, incluidos venezolanos, nicaragüenses y haitianos, han recibido el TPS y como resultado, «han hecho contribuciones invaluables tanto a nuestra comunidad como a nuestra economía».
La congresista demócrata por Florida Debbie Wasserman Schultz se mostró «profundamente agradecida» por el anuncio de la Administración de Joe Biden, que refleja un «liderazgo compasivo y pragmático en nombre de los venezolanos», según dijo en una publicación en X (antes Twitter).
A su turno, el joven legislador Maxwell Alejandro Frost, representante de un distrito electoral del centro de Florida en el Congreso en Washington, destacó hoy en la misma red social que la redesignación del TPS «es un paso vital para brindar seguridad y oportunidades a quienes buscan refugio» y que «trae un nuevo sentido de esperanza a esta comunidad».
«Este anuncio es un alivio para quienes solo tenían la opción de procesar un asilo político sin ser perseguidos, sin tener una causa válida para solicitarlo», señaló por su parte Patricia Andrade, de la organización Venezuela Awareness.
Con la medida ahora podrán beneficiarse decenas de miles de venezolanos que abandonaron su patria ante «la grave crisis política, económica, humanitaria y de seguridad que atraviesa el país», agregó la activista, quien abogó por «una política migratoria segura, ordenada y organizada, no basada en la improvisación».
«Ante el alarmante incremento de venezolanos que se encuentran en tránsito o ingresando a Estados Unidos por puertos no autorizados, cifras que en un tiempo muy corto, como las últimas semanas, se han duplicado, merecen otras respuestas inmediatas y normas planificadas con anticipación. No se puede tomar una medida cuando ya pisamos una situación de crisis», ahondó.
Andrade, como otros activistas y funcionarios, pusieron de relieve que el anuncio del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) incluye además pasos de cara a mejorar el procesamiento de los permisos de trabajo para las personas elegibles y autorizadas.
Hasta ahora, solo podían acogerse al TPS aquellos venezolanos que hubieran estado en Estados Unidos desde marzo de 2021, cuando Biden anunció la entrada en vigor del programa, pero con este cambio el número de venezolanos que podrían obtener un permiso para trabajar y residir pasa de 242.700 a 472.000, de acuerdo al DHS.
La ampliación de los alcances para los venezolanos de este programa ha servido para que líderes de otras comunidades inmigrantes recuerden que el beneficio no solo debe aplicarse al caso de los venezolanos.
En ese sentido, Bertha Sanles, de la organización American Friends Service Commitee (AFSC), recordó que los nicaragüenses también han solicitado en el último año una redesignación del TPS.
«La Administración Biden no ha cumplido su promesa de reforma migratoria, pero aún puede cumplir su compromiso de mantener seguras a las familias redesignando el TPS» para Nicaragua y otros países que cumplen con los mismos requisitos de venezolanos y ucranianos, dijo en una nota de prensa.
EFE