Un exorganizador del grupo extrema de derecha Proud Boys fue condenado el jueves a 17 años de prisión por encabezar el asalto al Congreso de Estados Unidos para impedir la transferencia pacífica del poder de Donald Trump a Joe Biden tras las elecciones de 2020.
La sentencia para Joseph Biggs es la segunda más larga dictada por el asalto hasta el momento, después de la sentencia de 18 años de prisión para el fundador de Oath Keepers, Stewart Rhodes.
Los fiscales federales recomendaron una sentencia de 33 años para Biggs. Él y otros Proud Boys se unieron a la turba que el 6 de enero de 2021 rompió las filas policiales y obligó a los legisladores a huir durante la sesión conjunta del Congreso para certificar la victoria electoral del demócrata Biden.
Biggs reconoció ante el juez que “metió la pata ese día”, pero lo atribuyó a haber sido “seducido por la multitud” de partidarios de Trump afuera del Capitolio y dijo que no es una persona violenta ni “un terrorista”.
El juez que condenó a Biggs también sentenciará por separado a otros cuatro Proud Boys condenados por un jurado en mayo.
Tarrio no estaba en Washington el 6 de enero. Había sido arrestado dos días antes del motín en el Capitolio acusado de dañar una pancarta de Black Lives Matter durante una manifestación anterior en la capital del país, y cumplió con la orden de un juez de abandonar la ciudad después de su arresto. Él escogió a Biggs y al presidente del capítulo de Proud Boys, Ethan Nordean, para que fueran los líderes del grupo en el terreno en su ausencia, dijeron los fiscales.
Biggs, de Ormond Beach, Florida, sirvió en el ejército durante ocho años antes de ser dado de baja por razones médicas en 2013. Más tarde, trabajó como corresponsal de Infowars, el sitio web operado por el teórico de la conspiración Alex Jones.
Los abogados de los acusados argumentan que el Departamento de Justicia está responsabilizando injustamente a sus clientes por las acciones violentas de otras personas entre la multitud de partidarios de Trump en el Capitolio.
Más de 1.100 personas han sido acusadas de delitos federales relacionados con los disturbios en el Capitolio. Más de 600 de ellos han sido declarados culpables y sentenciados.
AP