Según nuevos datos de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS) publicados este miércoles, la economía en Estados Unidos agregó 306,000 puestos de trabajo menos el año pasado, proyectándose de esta manera como uno de los datos más débiles, ante las estimaciones de algunos analistas que consideran que el mercado laboral se mantiene históricamente sólido este año.
En este sentido, Chris Rupkey economista de FwdBonds destacó que “el cambio es del -0.2% y el ajuste promedio en los últimos 10 años ha sido del 0.1%. No vemos ninguna señal aquí de que el mercado laboral sea secretamente débil“.
De acuerdo con el informe del BLS, las ganancias promedio durante los últimos 12 meses terminados en marzo de este año equivalen a 300,000 empleos agregados, es decir unos 25,000 mensuales.
Al respecto, Rupkey señaló que “hay que tener en cuenta que la economía sigue creciendo y ha creado 870,000 puestos de trabajo más desde marzo. El empleo en nómina de julio es de 156,342 millones. Cuando la economía deje de crecer, veremos caer el empleo no agrícola. En la revisión del índice de referencia no se vislumbra ninguna recesión”, dijo.
Un mercado laboral más sólido
Aunque desde el año pasado, las subidas de los tipos de interés como parte de una estrategia de la Reserva Federal para controlar la inflación, influenciaron negativamente sobre el mercado laboral, y otros sectores de la economía, en los últimos meses su crecimiento se ha mostrado lento pero fuerte.
Pese a que hubo áreas específicas con grandes olas de despidos, el mercado se mantiene consistente evitando los despidos más generalizados; y se le agrega a esta la ecuación el aumento de los salarios y el constante gasto de los consumidores que sigue siendo lo suficiente como para que la economía se mantenga en crecimiento.
Para Brett Ryan, economista senior del Deutsche Bank en Estados Unidos “no es una revisión reveladora que realmente cambiaría el panorama en términos de dónde se encuentra la economía en este momento”, dijo a CNN al tiempo que mencionó: “Creo que la probabilidad de que la economía caiga en una recesión a corto plazo ciertamente ha disminuido“.
Arleny Tabare / LO
