Pese a los esfuerzos del presidente brasileño, Luiz Inàcio Lula da Silva, por presentar un plan de paz para la guerra en curso en Europa, Ucrania respondió este viernes que no entregará Crimea, península anexionada por Rusia en 2014, a cambio del fin del conflicto, algo que el mandatario sudamericano había sugerido como posible vía de acción.
“No hay ninguna razón legal, política o moral que justifique renunciar a un solo centímetro de territorio ucraniano”, escribió en Facebook el portavoz ucraniano, Oleg Nikolenko, quien también dijo que apreciaba “los esfuerzos del presidente brasileño para encontrar una manera de detener la agresión rusa”.
“Cualquier esfuerzo de mediación para restaurar la paz en Ucrania debe basarse en el respeto a la plena y total soberanía e integridad territorial de Ucrania, de acuerdo con los principios de la Carta de la ONU”, insistió Nikolenko.
El jueves, Lula había sugerido que Ucrania cediera la península de Crimea a Rusia para facilitar el fin de la guerra, y afirmó que el mandatario ucraniano Volodymyr Zelensky “no puede quererlo todo”.
”(El presidente ruso Vladimir) Putin no puede quedarse con el territorio de Ucrania. Quizá se hable de Crimea. Pero lo que volvió a invadir, tiene que repensarlo“, dijo también Lula en un encuentro con periodistas en el palacio presidencial de Planalto, en Brasilia.
Lula presentó en enero una propuesta para que un grupo de países medie en el conflicto ucraniano. El líder brasileño tiene previsto presentar este proyecto a su homólogo chino, Xi Jinping, en Pekín la próxima semana.
El jefe de Estado brasileño se mostró confiado en las posibilidades de éxito de tal proyecto, y confió en que el grupo de países pueda crearse a su regreso de China.
Rusia ha dicho en varias ocasiones en los últimos días que las conversaciones de paz son imposibles en el contexto actual, y aseguró que mantendrá su operación militar en Ucrania. El ministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, insistió el viernes en que las conversaciones de paz sobre Ucrania deben basarse en un ”nuevo orden mundial” libre de la dominación estadounidense.
AFP
