El oficialista Jorge Rodríguez, jefe de la delegación del régimen de Venezuela en la mesa de diálogo con la oposición en México, condicionó este jueves cualquier acuerdo referente a las elecciones presidenciales de 2024 a que se levanten todas las sanciones internacionales en contra del país.
Las condiciones para esos comicios, en los que Nicolás Maduro aspira a un segundo mandato de seis años, encabezan la agenda opositora en la mesa de diálogo, paralizada desde noviembre a la espera del desembolso de recursos congelados que se destinarían a atender la crisis social.
«Todos dicen lo mismo: abogamos por unas elecciones libres, competitivas, democráticas y creíbles», dijo Rodríguez, también jefe del Parlamento oficialista, en relación a pedidos de la comunidad internacional y la oposición. «Estamos de acuerdo con esa conseja de ellos: elecciones libres… libres de sanciones», siguió, en línea con una frase de Maduro idéntica en diciembre pasado.
«Venezuela no va a firmar ningún acuerdo con ese sector de la oposición hasta que esté 100% libre de sanciones, hasta que no se levanten las 765 medidas coercitivas unilaterales firmadas por Donald Trump y Barack Obama», expresó.
Las sanciones impuestas a integrantes del régimen venezolano desde 2015, intensificadas en 2019 con acciones directas contra sectores de la economía, como el petróleo, tras la reelección de Maduro un año antes en unos comicios tachados de fraudulentos por la comunidad internacional y la oposición.
Las sanciones son la principal ficha de negociación para presionar al régimen de Maduro para ofrecer condiciones electorales, entre estas el levantamiento de inhabilitaciones políticas impuestas a opositores que buscan ser candidatos.
«Los diálogos no son para perdones, son para acordar en los términos que se pueda acordar», señaló Rodríguez, que pidió «justicia» contra los opositores que apoyaron la política de sanciones.
AFP