Autoridades iraníes arrestan a actriz de película ganadora de un Oscar por solidaridad con los asesinados por el régimen

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Las autoridades iraníes arrestaron el sábado a una de las actrices más reconocidas del país luego de manifestar su desacuerdo por el asesinato de los ciuidadanos involucrados en las protestas.

Por su parte el intocable régimen iranñi la acusa de haber difundido comentarios falsos sobre las protestas, dijeron medios estatales.

El informe de IRNA dice que Taraneh Alidoosti, estrella de la película ganadora del Oscar “The Salesman”, fue detenida una semana después de que hizo una publicación en Instagram expresando su solidaridad con el primer hombre ejecutado recientemente por delitos presuntamente cometidos durante las protestas.

El anuncio es el último de una serie de arrestos de celebridades, que incluyeron futbolistas, actores y personas influyentes, en respuesta a su abierta muestra de apoyo a las manifestaciones antigubernamentales ahora en su tercer mes.

Según el informe publicado en el canal oficial Telegram de los medios estatales, Alidoosti fue detenida porque no aportó “ningún documento acorde con sus afirmaciones”.

Dijo que varias otras celebridades iraníes también habían «sido citadas por el cuerpo judicial por publicar contenido provocativo» y que algunas habían sido arrestadas. No proporcionó más detalles.

En su publicación, la actriz de 38 años dijo: ″Su nombre era Mohsen Shekari. Toda organización internacional que esté observando este derramamiento de sangre y no tome medidas, es una vergüenza para la humanidad”.

Mohsen Shekari fue ejecutado el 9 de diciembre tras ser acusado por un tribunal iraní de bloquear una calle en Teherán


Shekari fue ejecutado el 9 de diciembre tras ser acusado por un tribunal iraní de bloquear una calle en Teherán y atacar con un machete a un miembro de las fuerzas de seguridad del país.

En noviembre, las autoridades arrestaron a Hengameh Ghaziani y Katayoun Riahi, otras dos famosas actrices iraníes, por expresar su solidaridad con los manifestantes en las redes sociales. Voria Ghafouri, un futbolista iraní, también fue arrestado el mes pasado por «insultar a la selección nacional de fútbol y hacer propaganda contra el gobierno». Los tres han sido puestos en libertad.

Desde septiembre, Alidoosti ha expresado abiertamente su solidaridad con los manifestantes en al menos tres publicaciones en Instagram. Su cuenta, que tenía unos 8 millones de seguidores, ha sido suspendida.

La semana pasada, Irán ejecutó a un segundo prisionero, Majidreza Rahnavard, en relación con las protestas. El cuerpo de Rahnavard quedó colgado de una grúa de construcción como una espantosa advertencia para los demás. Las autoridades iraníes alegaron que Rahnavard apuñaló a dos miembros de su fuerza paramilitar.

Tanto Shekari como Rahnavard fueron ejecutados menos de un mes después de haber sido acusados, lo que subraya la rapidez con la que Irán ejecuta ahora las sentencias de muerte impuestas por presuntos delitos relacionados con las manifestaciones. Los activistas dicen que al menos una docena de personas han sido sentenciadas a muerte en audiencias a puerta cerrada. Irán es uno de los principales verdugos del mundo.

Irán se ha visto sacudido por protestas desde la muerte el 16 de septiembre de Mahsa Amini, de 22 años, quien murió luego de ser detenida por la policía moral. Desde entonces, las protestas se han transformado en uno de los desafíos más serios a la teocracia iraní instaurada por la Revolución Islámica de 1979.

Alidoosti había criticado previamente al gobierno iraní y su fuerza policial antes de las protestas de este año.

En junio de 2020, recibió una sentencia condicional de cinco meses de prisión luego de que criticara a la policía en Twitter en 2018 por agredir a una mujer que se había quitado el velo.

AP