El huracán Ian puede haber causado hasta US$ 47.000 millones en pérdidas aseguradas, según la última estimación, lo que podría convertirlo en uno de los ciclones más costosos de la historia del estado.
CoreLogic, una empresa de investigación que calcula las pérdidas por catástrofes naturales, publicó la estimación de los daños hasta el jueves por la noche. Las estimaciones combinan las pérdidas aseguradas a través de los seguros privados, que suelen cubrir los daños causados por el viento, y el Programa Nacional de Seguros contra Inundaciones de la FEMA, que cubre los daños causados por el agua.
Las estimaciones de CoreLogic oscilan entre US$ 22.000 y US$ 32.000 millones en daños por viento y entre US$ 6.000 y US$ 15.000 millones en daños por inundación. Así que, en total, el extremo inferior de la estimación combinada sería de US$ 28.000 millones, justo por encima de los US$ 26.500 millones en pérdidas causadas por el huracán Andrew, que azotó el sur de Florida en 1992, y que ha sido calificado como el ciclón tropical más costoso del estado desde entonces.
Pero esa estimación de las pérdidas ocasionadas por el huracán Andrew, producida por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en inglés), representa el costo de hace 30 años. Ajustado a la inflación, el costo de Andrew en dólares de 2022 sería de US$ 55.700 millones.
Aun así, si las estimaciones de CoreLogic resultan exactas, sobre una base ajustada a la inflación Ian sería la segunda tormenta más cara del estado.
CNN