El Reino Unido y líderes de diferentes partes del mundo despiden a la reina Isabel II. Tras su funeral en Londres, dio un último paseo por las calles de su pueblo, antes de ser enterrada en la Capilla de San Jorge.
El féretro ha sido bajado a la bóveda real de la capilla, tras la ceremonia religiosa a la que asistieron miembros de la familia real y de otras casas reales.
El féretro de la monarca fue sacado del templo sobre una cureña tirada con cuerdas por más de un centenar de marineros de la Royal Navy (Marina). Después recorrió en procesión las calles de la capital, seguido a pie por el nuevo rey Carlos III, el príncipe Guillermo de Gales y otros miembros de la familia real.
A su llegada al arco de Wellington, en la esquina sureste de Hyde Park, el ataúd fue transferido a un vehículo fúnebre y, desde allí, partió en su último viaje, hasta Windsor, a unos 35 kilómetros de Londres.
A su llegada, como estaba previsto, los restos de Isabel II recorrieron en procesión los cerca de 5 kilómetros del denominado Long Walk, la avenida arbolada que desemboca en el castillo de Windsor.
En los últimos años, esa capilla acogió el enlace entre el príncipe Enrique y Meghan, en 2018, así como el funeral del príncipe Felipe, esposo de la reina, en abril de 2021.
El féretro de Isabel II, la monarca más longeva y con más años de reinado en la historia del Reino Unido, fue enterrado junto a los restos de su esposo en la cripta de la capilla.
EFE