Un hombre armado abrió fuego el martes en una escuela primaria en Uvalde, Texas, matando a más de 20 personas, incluidos 18 niños y 2 profesores, en lo que es el tiroteo más mortífero en una escuela primaria de Estados Unidos desde el ataque a la escuela primaria Sandy Hook en Newtown, Connecticut, en 2012.
La policía estatal actualizó el número de muertos el martes por la noche y anunció que cuatro niños más estaban entre los muertos, para un total de 18. Entre los muertos también se encuentran otras tres personas, incluyendo un maestro y el tirador, según el Departamento de Seguridad Pública de Texas. Otras personas resultaron lesionadas en el tiroteo.
El gobernador Greg Abbott dijo que el tirador está muerto y se cree que fue muerto por los oficiales que respondieron. El tirador actuó solo, dijo Pete Arredondo, jefe de policía del Distrito Escolar Independiente Consolidado de Uvalde.
“Lo que sucedió en Uvalde es una tragedia horrible que no se puede tolerar en el estado de Texas”, dijo Abbott.
La masacre ocurrió en la escuela Robb Elementary School, en la ciudad de Uvalde, que es la sede del gobierno del condado del mismo nombre, con una población predominantemente hispana. Uvalde está a unas 85 millas al oeste de San Antonio y a unas 75 millas de la frontera con México.
Robb Elementary se encuentra en un vecindario principalmente residencial de casas modestas. Hay una funeraria al otro lado de la calle de la escuela.
Así lo señaló el gobernador de Texas, Greg Abbott, en una rueda de prensa en la que precisó que el atacante, identificado como Salvador Ramos, tenía 18 años y era vecino de Uvalde.
El tiroteo masivo está reabriendo el debate político nacional sobre las leyes de armas y el control de las armas. Hace sólo 10 días, un hombre armado disparó fatalmente a 10 personas dentro de una tienda de comestibles de Buffalo, en el estado de Nueva York.
