Al igual que otras ciencias regidas por leyes, la economía también se rige por un conjunto de leyes o reglas científicas que condicionan el modo en el que se producen los hechos económicos, tales como, la oferta, la demanda, los precios de los bienes, el ahorro, la inversión, el tipo de cambio y las variadas decisiones que los actores toman en materia económica nacional e internacional. En toda ciencia donde se viole cualquiera de sus leyes, las consecuencias pueden ser nefastas. Por ejemplo; en la física, quien pretenda transgredir la ley de la gravedad queriendo saltar de una altura considerable creyendo que llegara a tierra sano y salvo, seguramente aterrizara desastrosamente. Pues bien, asimismo sucede con la ciencia económica, donde los gobiernos, sobre todo los de corte populista o comunista, que son expertos en violentar las leyes de la economía, las consecuencias siempre han sido catastróficas desencadenando irremediablemente en una serie de distorsiones que redundan en pobreza para la sociedad.
Es importante destacar que la economía es una ciencia social y por ende no es exacta, casi siempre, los pronósticos económicos van a depender de que ciertas variables permanezcan constantes, de allí el famoso “Ceteris paribus” que significa “Con los demas factores constantes”, es decir, cuando se analiza un fenomeno determinado donde el economista predice algun tipo de resultado, utiliza este termino, diciendo que si los factores del entorno permanecen constantes sucedera tal cosa, lo cual casi siempre es imposible, porque en economia los factores casi nunca permanecen constantes debido a su carater de ciencia social. De alli el no menos famoso refran que los “Economistas no pegan una” y me incluyo.
Lo que si me atrevo a asegurar, es que cuando se violentan las leyes de la economía, suceden eventos que terminan por empobrecer el sistema, debido a que la economía se reconfigura en función de la intervención originando distorsiones que siempre son nefastas para la gente. Por ejemplo, siempre que el gobierno regula el precio de un determinado bien por debajo de su costo o no permitiendo una ganancia razonable, el productor termina por dejar de producirlo ya que no está dispuesto a perder en la operación y el resultado es la escasez del mismo, perjudicando al consumidor final. ¿Porque un diamante es “caro” o costoso?, lo es, ya que responde a tres leyes de la economía; la Ley de la oferta, porque la producción de diamantes es limitada, la Ley de la demanda, ya que casi todos quisieran poseer diamantes y la Ley de la escasez, debido a que un carbón para que se convierta en diamante, deben pasar muchos años a altas presiones y ciertas condiciones en procesos volcánicos profundos y demás, y finalmente estos sean llevados cerca de la superficie terrestre. Así que a ningún ridículo gobierno populista se le puede ocurrir regular el precio de los diamantes porque sencillamente acabaría con el negocio.
Otras políticas nefastas de gobiernos populistas que terminan por empobrecer la economía, son las expropiaciones, nacionalizaciones y toda acción que desprecie el arte de la gerencia, el emprendimiento y la inversión privada, en la creencia que la clase trabajadora es el único factor generador de riqueza, nada más alejado de la realidad, no estoy despreciando el trabajo, sería un contrasentido, lo que afirmo es que el trabajador, en armonía con la gerencia e inversionistas, en el marco del saber científico en términos de planificar, ejecutar, controlar y dirigir estratégicamente las empresas, generan la riqueza esperada. Los populistas, hasta ahora no han terminado de entender, que al romper esa regla se destruye la producción y todo valor agregado en el sistema. No han terminado de entender el origen del desmembramiento de la Unión Soviética, la crisis de Cuba, de Venezuela y el viraje de la China en materia económica, por mencionar solo algunos casos.
A estas alturas, algunos líderes de la izquierda chilena están proponiendo una nueva constitución de corte socialista, que expropie, nacionalice y ponga el potencial de generación de riqueza solamente en manos del factor trabajo. Sin embargo, pensé que esa barbarie de propuesta, no va tener eco en algún estamento político de ese país, porque sencillamente, tienen una historia reciente sobre esas praxis. Pero en el caso que Chile se vaya por ese camino, seguramente, en primera instancia dejara de ser miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos OCDE, organismo de cooperación internacional conformado por 38 países, cuyo objetivo es coordinar sus políticas económicas y sociales, intercambiar información y armonizar políticas con el objetivo de maximizar su crecimiento económico en pro del desarrollo. Se le conoce como el “Club de los países ricos”, el producto interno bruto de sus miembros esta por el orden del 65 % del PIB nominal mundial. Así que Chile se acerca a una encrucijada.
En definitiva, la economía es una ciencia a la cual se le deben respetar sus leyes para que la misma se desenvuelva a plenitud, a los efectos de generar los mejores resultados. Por lo tanto, los gobiernos deben entender que su trascendencia va a depender de la eficacia y eficiencia de su sistema económico, y no del tamaño del Estado, deben dejar la pretensión de ser un actor económico más en escena y mucho menos ser el único actor económico.
Alberto Barboza
Coach Gerencial en liderazgo, planificación y productividad
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