Eneida Valerio: Migración venezolana desafía y sigue

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La  crisis migratoria venezolana es la mayor a nivel de la región, no obstante, otros países como Guatemala y Honduras han incrementados estos movimientos y convertido el problema en una cuestión de carácter hemisférica, que llama la atención por las distintas derivaciones del problema. Se estimó para el año 2021 una cifra de migrantes venezolanos superior a 5 millones y conforme la Oficina de Migrantes de la ONU puede, ubicarse en más de 7 para este año.

Nuestra población se ha contraído en esa cantidad y comenzamos a perder el bastión más importante; la juventud, que enriquece a otros.  

La situación, se torna vulnerable y ubica al venezolano migrado, en una precaria condición tomando en cuenta condiciones socioeconómicas y sociodemográficas, así como de exclusión para acceder a los derechos de salud, educación y de cohesión social, cualquiera sea el país que acoge a millones de compatriotas, desmoralizados y sometidos a presiones muchas veces indignas.

Los  migrantes venezolanos, se han convertido en paria, sin quererlo y menos aún, merecerlo. Sus derechos humanos son burlados  y la condición ciudadana socavada. Llegaron a distintos países, desde procesos más humanos al inicio del fenómeno en el 2015 a ser balseros como ocurrió el pasado noviembre, cuando un grupo de 40 personas fueron rescatadas e internadas en un centro para tales fines en EE.UU

Es la primera vez, que nos topamos con esta situación desde que trabajamos en la OEA como Coordinador para la migración, dijo David Smolansky. 

Los balseros, burlaron los riesgos y llevados a un centro de retención en más de 40, abortaron esta odisea que antes, se estima que 50 mil, lo han hecho vía terrestre a través de la frontera mexicana  en difíciles condiciones humanas, para alcanzar Texas. La migración, ha trepado a problemas en extremo complejos y se espera, se agudice en el presente año, tomando en cuenta la insatisfacción de las necesidades en nuestro pais.

Por  esto, debemos llamar la atención y difundir  tan dramática situación que conforme la OEA nos coloca como el segundo después de Siria, un país, en guerra que completa un poco más de 6 millones. Nosotros, no tenemos esa  bélica situación de los sirios pero igualmente, tenemos sed de justicia, sed de atención y sed de paz y saciarnos  a mediano plazo. Nuestros compatriotas merecen el regreso digno a la patria de sus anhelos y sueños medido por la riqueza de su tierra que llena las aspiraciones de propios y extraños.

Del total de migrados estimado por la OIM, el 70%  están asentados en Colombia, Perù, Ecuador, Brasil y Chile. Este último, ha implementado medidas más restrictivas y ha recibido tales medidas, críticas de instancia internacionales, incluyendo  ONG  demandantes en varias oportunidades de medidas humanitarias, ante deportaciones forzosas del gobierno de Piñera.

Colombia, ha sido el único país que a  través de políticas  públicas adoptadas por el gobierno del presidente Iván Duque, ha facilitado la inclusión cercana a 2 millones de compatriotas.

La aprobación del documento, Protector Temporal Migratorio ha dado acceso a la salud y trabajo y  en cuanto la mano de obra, particularmente de los jóvenes venezolanos contribuye hace varios años con el crecimiento del PIB del vecino país. La población de Colombia  está constituida en 3.2% por venezolanos.

En Perú, el gobierno del depuesto presidente Martin Vizcaya, daba los primeros pasos para regularizar la permanencia  de una alta concentración de venezolanos, con similares características a la de Colombia. Todo se paralizó ante una exacerbada xenofobia liderado por el presidente Pedro Castillo, con un soso discurso de persecución ideológica. No así, sus actos, con serias derivaciones en su contra, por asuntos oscuros referidos a sus actuaciones.

En Colombia, existen particularidades que llaman la atención. La violencia característica del país y hasta  subyacente a través de diferentes fuentes, se ha querido emparentar a la presencia estimada en dos millones de venezolanos. No hay dudas que priva  en buena parte para endilgarla, la despreciable xenofobia y en tal sentido, los estudiosos  del problema, investigadores de las posibilidades presumidas, precisan que nada es cierto.

Se estudió el caso concreto de la capital Bogotá, donde se concentra el mayor número de los migrados y la participación se constriñe a delitos menores. No hay participación de compatriotas en las bandas organizadas y esto, se extiende a otras regiones, conocidas por una alta tasa delictiva.

Sin embargo, hay en el mundo delictual, una interesada actitud de persecución tanto a los adultos como a los menores, especialmente, niños, niñas y adolescentes acosados en sus trabajos de calle como mecanismo de sobrevivencia y quienes han comentado sobre sus temores.

Las instancias internacionales, trabajan en desmontar esta situación y hay unas primeras opiniones de que no todos regresarán, luego de haberse establecido en otros países, con éxitos importantes, pero entonces, pueden trabajar desde cada una de sus posiciones a favor del país y esto a primera vista, luce interesante. Hay una percepción general de transición bien sostenidas.

Y conlleva esto, otros escenarios políticos muy interesantes. Esta semana MOVER liderada por Nicmar Evans, un ex chavista radical ha llegado al CNE para dar inicio a los pasos primeros que logren la realización del referendo revocatorio, cumplida la mitad del periodo del presidente, Nicolás Maduro. Ya en 2016, la MUD cumplidos el proceso para revocarlo en su primer periodo, no pudo hacerlo, porque juzgados penales, no amparados constitucionalmente, lo suspendieron. Es decir, se jugó y burló con los condicionamientos legales, establecidos en nuestra Magna Carta.

Todo es posible ahora. Nada debe extrañarnos que no sea las resquebrajadas condiciones tanto del régimen como del partido que le sostiene. El PSUV. Juega con sus pugnas, intrigas y  descontento que minan esa estructura otrora rutilante y ahora, agrietada. Lo  acabamos de ver en Barinas y cuyo efecto pirámide, inspira la política nacional e internacional.

Nadie  apostaba a Barinas .Si la política sorprende, confiemos entonces.   

ENEIDA VALERIO RODRIGUEZ (@eneidavalerio)