Un total de 90.396 venezolanos han sido acogidos en España por razones humanitarias desde 2019, cuando se empezó a aplicar este tipo de protección a estos ciudadanos latinoamericanos al entender que en su caso no se dan las condiciones para ser reconocidos como refugiados ni beneficiarios de protección subsidiaria.
Más de 5,6 millones de venezolanos han abandonado sus hogares desde que en 2014 comenzaron las protestas por la crisis económica que atravesaba el país. En marzo de 2018 la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) instó a los estados a otorgar a estos ciudadanos la protección debida porque Venezuela vivía una crisis humanitaria y no se podía devolver a nadie al país.
A raíz de esa recomendación de la ONU, el gobierno español comenzó a aplicar la fórmula de protección por razones humanitarias para dar una respuesta adecuada y acorde con la ley de Asilo a los venezolanos que huyen del país.
«Hasta entonces, España, con gobiernos de distinto signo, denegaba las solicitudes de protección internacional de los venezolanos», recuerda a EFE la directora de Políticas y Campañas de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), Paloma Favieres.
Esta fórmula, que empieza a aplicarse «partiendo de una crisis humanitaria y no de una situación política», se traduce en un permiso de residencia y trabajo por un año prorrogable para que los afectados no queden en un limbo jurídico.
EFE