Leopoldo López vuelve hacer de las suyas. Acaba de nombrar al embajador del interinato ante la Organización de los Estados Americanos, Gustavo Tarre Briceño, en el Banco Interamericano (BID) de Desarrollo como director ejecutivo de la silla de Venezuela-Panamá.
Ambos cargos exigen la dedicación exclusiva por lo que Tarre tendrá que decidir como atenderá las dos obligaciones Ambos puestos son remunerados.
López decidió usar la influencia que mantiene sobre el interinato que lleva Juan Guaidó para hacer la jugada.
El G-4 no se reunió para tomar la decisión. La directora ejecutiva anterior, Gina Montiel, había dicho que estaría en esa posición hasta diciembre de 2020. Pasaron varios meses, hasta que se agotó por la falta de unidad y estrategia y puso su renuncia a partir del 1 de octubre de 2021.
Otra muestra más de su personalismo excesivo
López, que ha llevado al país al colapso político en varias oportunidades, desatendió un acuerdo político y logró imponer su candidato, alguien más manejable para sus intereses, con la excusa de la temporalidad, hasta que se reúna el G-4. Una temporalidad que será hasta que el interinato finalice su pobre gestión.
Según los entendidos se trataba de una vacante para una figura técnica que debía ser escogida este año por el partido Un Nuevo Tiempo. La reacción es parte del divorcio definitivo del G4, luego de las acusaciones
En este caso se acusa a López, de nuevo, de irrespetar los acuerdos políticos, generando un mayor abismo entre Primero Justicia, Voluntad Popular, Acción Democrática y Un Nuevo Tiempo, involucrados de una u otra manera en las irregularidades señaladas entre ellos mismos con Monómeros y los desvíos de las ayudas humanitarias.
Las muestras del excesivo protagonismo y del irrespeto por los acuerdos de López se acumulan: 30 de abril de 2019, Operación Gedeón y también es prudente agregar el caso Monómeros.
El escándalo Monómeros
Es prudente recordar, que López tenía una operación en marcha en la compañía Monómeros Colombo Venezolanos, para llevarla a la insolvencia financiera y que dicha empresa pasara a manos de su principal acreedor, que es Nitron Group LLC.
Esa maniobra tuvo un primer percance con la resolución de la Superintendencia de Sociedades de Colombia (Supersociedades), que impone la intervención de Monómeros para, supuestamente, protegerla de Maduro aunque luego se confirmó que también buscaba protegerla de un sector de la oposición liderado por López.
Las irregularidades en esta compañía, que forma parte de los activos del país en el exterior, se han convertido en un escándalo que salpica a López y a toda la oposición, aunque la mayor cuota de poder la ha tenido Voluntad Popular desde que el interinato tomó control en 2019.
En el acuerdo el cargo era de UNT
Regresando a la designación del representante de Venezuela ante dicho organismo, Manuel Rosales, actualmente en campaña por la gobernación del Zulia, propuso su candidato con tiempo a López para ser sometido al BID. López le dio largas porque teme que en la Asamblea General de la OEA que se llevará a cabo este mes, Tarre no logre los votos para seguir representando el interinato. Entonces, decidió colocarlo en el BID.
Lo que ocurrió fue que no contaron que Montiel renunciara un mes antes. Con eso y todo, López impuso a Tarre. ¿Será que da por perdía la embajada ante la OEA?, o ¿es que piensa conseguir contratos para personas del Voluntad Popular en el Banco?
Algunos políticos venezolanos creen que pueden acceder a los recursos del BID como si se tratara del Banco Industrial de Venezuela, para financiar sus organizaciones políticas, las movilizaciones, viajes y costosos modos de vida, pero en el caso del BID están equivocados.
El G4 a la deriva
A escasas semanas para las regionales todos los líderes del G4 manejan una agenda por su cuenta, sus líderes mataron la Unidad. Las gobernaciones que ganen algunos partidos obedecerán más al voto castigo contra Maduro que por el falso canto de una oposición unida. López decidió bombardear junto a Guaidó los comicios regionales. Saben que vendrán días duros y no les queda otra que prepararse para un invierno político hasta las presidenciales del 2024 y posiblemente sin interinato.
Algunos líderes de España y América Latina han manifestado su preocupación por las reacciones y respuestas de López, quien actualmente se encuentra en Miami, maniobrando en el tema del BID.
No hay dudas que las malas decisiones de Leopoldo han contribuido a arruinar una gran oportunidad de desalojar a Maduro del poder.
Sin embargo, la tesis de Leopoldo y Guaidó es extender el interinato y por eso, a través de Delsa Solórzano, asomaron la “necesidad” de prorrogar el Estatuto de Transición.
Sin duda que el interinato ha sido tremendo negocio para ellos.
Amanecerá y Veremos.
VenezuelaUSA.org y Verdades y Rumores.com