Neuro Villalobos: Asumamos la educación con seriedad

587

“Hay razones que indican que para ser más competitivos es necesario ser más productivos, eficientes y excelentes tanto en la producción de bienes materiales como en la producción de conocimientos, y éstos deben ser de calidad.” Neuro J. Villalobos R.

La calidad de la educación es un concepto multidimensional, en ella confluyen diversos elementos y factores que es necesario tomar en consideración como lo son: la naturaleza de las instituciones, el desarrollo del conocimiento y el contexto social en el cual se imparte la educación.

La calidad de la educación toca también un aspecto fundamental que está relacionado con las raíces de la identidad cultural. Contrarrestar la distorsionada visión social que lleva más de veintiún años tratando de imponerse, es una tarea muy importante para el rescate de la juventud y de nuestros niños. Se impone un esfuerzo extraordinario para restituir los valores a través de la educación familiar y el sistema educativo en todos sus niveles y modalidades.

Las instituciones educativas se encuentran frente a una nueva revolución, la revolución de la inteligencia y la creación de riqueza profunda y continuada en la que predomina el uso de la robótica, la microelectrónica y la biotecnología, cuya incidencia es decisiva en la teleinformática, las comunicaciones, la computación y, consecuentemente en los sistemas educativos. Entender a profundidad el grado de deterioro de la sociedad venezolana y sus instituciones debe servir de acicate para su recomposición por parte de aquellas personas comprometidas con su futuro y no para quienes basan sus soluciones en simples maquillajes o empaquetamientos.

El desarrollo de las tecnologías de la información y de las comunicaciones conlleva a una redefinición completa y cabal de la misión educativa. Los roles institucionales, y los individuales de profesores y estudiantes cambia totalmente. Como podemos imaginar, en adelante el estudiante aprenderá más y más por sí mismo, mediante procesos de intercambio a través de las redes. El profesor ya no transmitirá un conocimiento estructurado, sino que enseñará a los estudiantes a pensar y organizar caminos individuales de aprendizaje.

Hay que educar para la libertad, educar para la democracia. Enseñar a discutir; formar ciudadanos demócratas, inconformes, pero, conforme a los a lo que los valores democráticos establecen. Despertar la inquietud por el destino personal, apegado a los valores individuales, sin desconocer las exigencias armonizadoras con los valores sociales, entre los cuales, los democráticos son esenciales. Dicho en palabras de Savater: “buscar en común una verdad que no tenga dueño y que no procure hacer esclavos”, mucho menos esclavos satisfechos.

El Instituo Tecnológico de Monterrey, México, creó el Instituto para el Futuro de la Educación (IFED), cuya razón de ser es “crear soluciones a los retos que enfrenta la educación a través de la investigación, la innovación y el emprendimiento en innovación educativa. Su Director asociado, el Dr. José Escamilla, expresa que “la educación tiene que armar a las personas para que se puedan reinventar cada vez más rápido. . . .esto implica dotarlas de habilidades como aprender a aprender, el manejo de tecnologías y el trabajo en equipo”.

El IFED se enfocará en las necesidades de la educación superior y el aprendizaje a lo largo de la vida, basado en tres pilares: 1. Transformar. Crear una plataforma abierta para la investigación de vanguardia, la innovación y el emprendimiento. 2. Conectar. Relacionarse con socios interdisciplinarios y actores globales claves. 3 Hacerlo realidad. Desarrollar un ecosistema para el avance de la educación en las universidades y el aprendizaje para la vida.

Es importante tomar en cuenta esta iniciativa y otras que seguramente existen en otros países que han asumido con seriedad el proceso educativo de la población como motor del desarrollo y del progreso de la nación. Tal como lo expresé en un artículo anterior, es urgente acumular fuerzas porque además de la tiranía empobrecedora interna que nos atenaza, en el mundo entero avanza con paso firme, la tiranía tecnológica que nos amenaza con dejarnos como simples espectadores mirando en lontananza.

Neuro J. Villalobos Rincón

[email protected]