Cuatro años después de que los votantes de Florida aprobaran la legalización de la marihuana medicinal, el Departamento de Salud estatal acaba de dar luz verde a la venta de la sustancia en productos comestibles, que deben indicar que contienen THC, el principal ingrediente psicoactivo de esta droga, se informó el viernes.
«A partir del 27 de agosto de 2020, los comestibles se han puesto a disposición como vía de administración para Pacientes de Marihuana Medicinal (MMJ)», escribió este viernes con «alivio» en su web el Centro de Atención Compasiva de Florida.
«¡Después de una larga espera, los pacientes de MMJ en Florida finalmente están obteniendo comestibles!», destacó la organización médica.
Entre las modalidades que se pueden vender en ciertos dispensarios están las gelatinas, los productos horneados, chocolates y bebidas en polvo, detalló el Departamento de Salud estatal en una guía.
De acuerdo con la ley estatal, el ente autorizado a emitir permisos de alimentos a los Centros de Tratamientos de Marihuana Medicinal (MMTC, por sus siglas en inglés) es el Departamento de Agricultura y Servicios al Consumidor (FDACS).
Esta última entidad destaca en su web que «los comestibles están definidos por la ley de Florida como alimentos (…) hechos con aceite de marihuana, pero no con otra forma de marihuana».
El gobernador de Florida, Ron deSantis, promulgó en marzo de 2019 la ley que deroga la prohibición que regía para fumar marihuana medicinal en el estado.
En Florida, su uso terapéutico entró en vigor en enero de 2017 tras un plebiscito aprobado en 2016 por más del 71% de los votantes.
«Los pacientes deben comprender que, si bien los comestibles son ahora una opción legal, aún habrá que esperar un poco antes de que haya una gran variedad de opciones disponibles», anotó el Centro de Atención Compasiva.
En cuanto a la presentación de los productos, las porciones individuales no deben contener más de 10 miligramos de tetrahidrocannabinol (THC) y las porciones múltiples no más de 200 miligramos, detalló el Centro.
Destacó que los envoltorios no deben estar decorados con chispas o coberturas de ningún tipo ni ser «demasiado coloridos» para que los niños no los confundan con golosinas.
EFE