Cada domingo, el solitario cura venezolano José Palmar invita, desde sus cuentas de Instagram y Twitter, a sus servicios religiosos a los migrantes venezolanos en la Florida Central.
“@padrejosepalmar Invitamos a los venezolanos en Orlando para la santa misa del primer domingo de Cuaresma este 1 de Marzo 5 pm – Park of The Americas 201 Andes Ave. Orlando Florida, 32807. Te esperamos en familia para orar y compartir. Lleva fe y tu silla portátil. Gracias por la solidaridad”.
“@padrejosepalmar Ya listo el altar para la misa dominical en el Park of The Americas en la 201 Andes Ave Orlando Florida a las 5 pm”.
Desde el pasado 15 de diciembre cientos de personas se reúnen los domingos en el parque Las Américas “deseosos del alimento espiritual y de una palabra de sosiego”, como ellos mismos lo definen. Allí comparten su experiencia y escuchan la palabra de Dios en silenciosa eucaristía, mientras siguen la homilía de Palmar, un expárroco conocido por todos debido a la persecución de la que ha sido víctima en el país del que tuvo que huir.
El presidente de Casa Venezuela en Orlando, William Díaz, presentó las cartas en inglés que diferentes organizaciones de la comunidad venezolana le han hecho llegar al obispo de Orlando, John Noonan, desde el 8 de septiembre de 2018, solicitando una audiencia para el padre José Palmar. Aún no han recibido respuesta.
Díaz señaló que la comunidad venezolana en Orlando solo busca la bendición del obispo Noonan para que el padre Palmar pueda servir a la numerosa diáspora apostada en esta franja de la Florida.
“Nunca hemos pretendido que al padre Palmar lo nombren o designen como párroco de ninguna iglesia, pero sí creemos que tiene los méritos suficientes para que sea segundo o tercer oficiante de las misas en español en el área de Lake Nona, donde hay una amplia comunidad de venezolanos, pero no hemos sido escuchados. No entendemos cuál fue el pecado cometido por el padre Palmar como para que sea ignorada la petición de la comunidad venezolana”, acotó el directivo de Casa Venezuela en el centro de la Florida
Díaz también hizo referencia a la inquietud que mantiene la diáspora venezolana en Orlando de que se les permita la construcción de un pequeño templo en honor a la Virgen de Coromoto, patrona de los venezolanos.
Javier Medina, abogado y miembro de Solidaridad Activa en Florida, manifestó que existe preocupación por la forma como ha sido tratado el cura venezolano.
“Palmar es un referente de la lucha contra la corrupción y contra el narcotráfico y un líder en defensa de los derechos humanos de los desposeídos en Venezuela, que nunca abandonó sus labores como hombre de la Iglesia católica. Por eso tanta gente lo sigue, porque conoce el dolor de la diáspora. No entendemos por qué se pretende inhabilitar al padre Palmar en su petición para seguir ofreciendo la homilía a su pueblo”, reiteró el también político en el exilio.
Palmar dijo que desde hace dos años espera una respuesta a la solicitud hecha por el arzobispo de Maracaibo, José Luis Azuaje, a las autoridades eclesiásticas en Orlando para que lo atiendan debido a su condición de perseguido de una dictadura. Y señaló que luego de conocer la necesidad espiritual de los migrantes venezolanos en la Florida Central, varias organizaciones le propusieron ofrecer una homilía a cielo abierto desde el Parque Las Américas.
“Queremos la bendición del obispo John Noonan para que nos deje compartir en oración el pan de la palabra y la eucaristía, tal como lo pide el derecho canónico. No estoy pidiendo una parroquia ni que me asignen una capilla, solo pedimos que nos dé el visto bueno para que la diáspora pueda construir a la Virgen de Coromoto un templo donde le podamos rezar, llorar y pedirle a Dios por nuestra patria”, finalizó diciendo el religioso venezolano.
Los venezolanos de Orlando esperan una respuesta de la Diócesis de Orlando. La Prensa se comunicó con es institución eclesiástica al respecto pero no se recibió respuesta.
Dámaso Jiménez para La Prensa de Orlando