Ni siquiera una democracia en crisis. Para el Índice de Democracia Mundial 2019 elaborado por la publicación británica The Economist, la Venezuela del usurpador Nicolás Maduro sólo tiene un calificativo: “régimen autoritario”.
Según la medición de este índice, en una escala de puntos que va del 1 al 10, Venezuela alcanzó 2.88 puntos durante 2019, lo que califica al país como un régimen autoritario. Este estudio ubicó a Venezuela entre las 54 naciones menos democráticas del mundo.
Dicho informe toma en cuenta al menos 9 aspectos para calificar a los 167 países que cada año figuran en la lista. Estos abarcan cinco categorías principales: procesos electorales y pluralismo; libertades civiles; funcionamiento del gobierno; participación política y cultura política.
Una vez agrupados por la calificación en estas categorías, el Índice de Democracia ubica a los países por sub-categorías que se rigen por democracias plenas, democracias defectuosas, regímenes híbridos y regímenes autoritarios.
Desde 2006, Venezuela ingresó a la categoría de regímenes híbridos. Esto interpreta aquellos regímenes que, si bien realizan periódicamente elecciones, su naturaleza y modus operandi corresponde al de sistemas autoritarios. También se le denomina como “autoritarismo competitivo”, por su intencionalidad de “competir” electoralmente para ganar cierto barniz de legitimidad democrática.
En este sentido, la radicalización política y el autoritarismo por parte del gobierno de Hugo Chávez y de su sucesor Maduro hicieron que el país cayera varios puestos con el pasar de los años.. En 2017, ya con Maduro en el poder, Venezuela entró por primera vez en la subcategoría de regímenes autoritarios con 3.87 puntos en la escala. En 2018 esta puntuación bajó hasta 3.16 puntos y en 2019 cayó a 2.88 puntos.
Esto hace que Venezuela esté en el puesto 140 de los 167 países analizados por el Índice de Democracia.
Esta lista la lidera Noruega, con 9.87 puntos de los 10 necesarios para encajar como una democracia plena en su totalidad; le siguen Islandia, Suecia, Nueva Zelanda y Finlandia.
Entre las 15 primeras democracias plenas del mundo, solo figuran dos países latinoamericanos: Uruguay, con 8.38 puntos, y Costa Rica, con 8.17 puntos.
Razón por tanto tenía el presidente encargado Juan Guaidó durante su gira exterior 2020 para hacerle entender a los principales gobiernos y organismos internacionales que en Venezuela funciona una “dictadura” con presos políticos amparada en redes criminales y delictivas implicadas dentro de las estructuras de poder.