El exembajador de EEUU en Venezuela y asesor principal del Programa de Las Américas del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales con sede en Washington, William Brownfield, aseguró que su país tiene conocimiento de la presencia en Venezuela de grupos criminales no venezolanos instalados de forma permanente que sirven como base de apoyo para sostener el régimen de Nicolás Maduro a cambio del saqueo de las riquezas en territorio devastado.
“Los EEUU tienen pruebas de la presencia de grupos criminales como el ELN o las unidades reconstituidas de las FARC que son parte del aparato de protección y seguridad de Maduro, junto a miles de militares cubanos, así como iraníes, libaneses y sirianos pertenecientes al Hezbollah, cuyo papel es resguardar la dictadura. Estamos hablando de una tragedia porque además de lo que hacen dentro de Venezuela, estos grupos ya comienzan a generar tensión y conflicto en los demás países del hemisferio”, acotó el diplomático estadounidense con vasto conocimiento y experiencia sobre lo que ocurre en Suramérica.
Brownfield manifestó su preocupación ante la presencia de grupos terroristas y criminales operando en Venezuela amparado por órdenes de Maduro y no descartó que tales acciones puedan influir en la balanza de las decisiones geopolíticas en las que se trabaja sobre el caso Venezuela.
“No voy a decir que ponen en peligro la seguridad nacional pero si es motivo de preocupación la posibilidad de operaciones desde Venezuela hacia varios blancos en los EEUU o cualquier otro país del hemisferio, es otro punto de tensión y de fricción en las relaciones de los países del hemisferio con Venezuela”, dijo.
Colapso económico, sanciones y diáspora
Lamentó la crítica situación económica que enfrentan los venezolanos al observar como cada día la hiperinflación destruye la esperanza de los trabajadores y empresarios venezolanos, pero rememoró que el grave colapso es consecuencia de los manejos turbios e irresponsables de un régimen corrompido y violatorio de la estabilidad y el bienestar de los ciudadanos venezolanos.
El exembajador de EEUU en Venezuela en la era de Chávez enfatizó que el colapso económico que sufre Venezuela no comenzó el pasado 10 de enero cuando asumió inconstitucionalmente Maduro un segundo mandato, sino que es consecuencia de las nefastas medidas económicas y la corrupción desatada por la actual dictadura.
“Las sanciones de los EEUU y de los países que integran el Grupo de Lima y la UE son medidas dirigidas contra individuos del régimen y el mismo Nicolás Maduro y su familia, para asegurar que acepten su responsabilidad por sus decisiones y acciones criminales y en mi humilde opinión, para dar a conocer a nivel internacional los actos delincuenciales y de acecho de estos grupos criminales forajidos. Las sanciones de los EEUU son una decisión tomada previa consulta con venezolanos tanto dentro como fuera de Venezuela, quienes decidieron aumentar la presión contra la dictadura de Maduro para detener lo más rápidamente posible la agonía que sufren los venezolanos”.
A su juicio es lo que ha agudizado y terminará expandiendo aún más la diáspora de venezolanos.
“La razón para la expansión de la diáspora venezolana en el exterior es la falta de trabajo, de medicinas, de salud pública, de seguridad, las razones están contenidas en una inflación de más de un millón de puntos porcentuales cada año, por la criminalidad de grupos amparados por el gobierno, es por la falta de comida y de electricidad, estas son las verdaderas razones por lo que se ha intensificado la diáspora. Es absurdo que mi querida ciudad de Maracaibo en el estado Zulia pasen días enteros y continuos sin electricidad.”
Para Brownfield estamos hablando de casi 6 millones de venezolanos que han huido fuera de sus fronteras, no porque quieran vivir en el extranjero alejados de sus familias y del entorno que los vió crecer y desarrollarse, sino que fueron empujados por la destrucción de su propio país, crimen cometido por una dictadura que se impuso en Venezuela.
Considera que el gobierno de los EEUU debe desarrollar un mecanismo para proteger a los venezolanos llámese TPS o cualquier otro que pueda brindar protección a los migrantes venezolanos en los EEUU.
“Voy a ofrecer mi opinión personal que puedo decir porque ya soy exmiembro del gobierno de los EEUU. Creo que no solo sería un desastre y una injusticia enorme si no se produce algún mecanismo para dar protección a los ciudadanos venezolanos residentes en los EEUU en este momentos. Esto nada tiene que ver con los casos complicados de América Central en búsqueda de una economía mejor ni de las comunidades que huyen de las pandillas, sino de razones ya estipuladas explícitamente en la Convención Internacional de Asilo Político y en la Ley Federal de los EEUU”.
El diplomático amigo del pueblo venezolano, propulsor del capítulo Venezuela en el Programa América del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, reconoce que en este momento la cuestión de migración está politizada en los EEUU, pero cree que más temprano que tarde el gobierno de Trump debe ofrecer alguna fórmula que brinde protección a la diáspora venezolana en los EEUU, sea TPS o algún otro instrumento.
“En 80% puedo predecir que se dará alguna fórmula porque no podemos deportar a miles de familias con las condiciones actuales que existen en Venezuela”, finalizó diciendo.
@damasojimenez
VenezuelaUsa.org